Facultad de Economía  
AÑO 2 / 2021 / DICIEMBRE Nº 02  
UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN DE AREQUIPA  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
Facultad de Economía  
Revista de la Unidad de Investigación  
de la Facultad de Economía de la UNSA  
Cienciasde  
lacomplejidad AÑO 2 / 2021 / DCIEMBRE Nº 02  
DOI: 10.48168/cc022021  
Decano de la Facultad de Economía  
Mg. Alejandro Chávez Medrano  
Equipo Editorial  
Editor  
Dr. Glenn Arce Larrea  
Consejo Editorial  
Dr. Eligio Cruz Leandro (México)  
Dr. Nelson Alfonso Gómez Cruz (Colombia)  
Dr. Carlos Eduardo Maldonado (Colombia)  
Dr. Leonardo G. Rodríguez Zoya (Argentina)  
Dra. María Nely Vásquez Pérez (España)  
Dr. Miguel Ramón Viguri Axpe (España)  
Dra. Wendy Ugarte Mejía (Perú)  
Investigador Junior  
Bach. Angela Daniela Portugal Pacheco  
Mg. María Luisa Paricahua Peralta  
Corrección de estilo y edición  
Edición y Diseño  
Lic. Jaime Mamani Velásquez  
UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN  
DE AREQUIPA  
Facultad de Economía  
Unidad de Investigación de la Facultad de Economía  
Revisión conceptual del Buen Vivir desde la perspectiva de  
la complejidad  
Conceptual Review of Good Living from a Complexity  
Perspective  
7
Rodrigo Severo Arce Rojas  
Universidad Nacional de Ingeniería UNI, Lima, Perú  
1
7
5
Mimesis y mediaciones bien vividas  
Mimesis and mediations well lived  
Juan Richar Villacorta Guzmán1  
https://orcid.org/ 0000-0001-9892-0734  
CIET (Centro de Investigación y estudios Transdisciplinares)  
Escuela Militar de Ingeniería - Bolivia  
Índice  
2
Buenas prácticas en transición energética en América  
Latina. El planteamiento sistémico de un problema  
complejo  
Good Practices in Energy Transition in Latin America.  
The Systemic Approach to a Complex Problem  
Emilio Nudelman Cruz  
Programa Nacional Estratégico en Energía y Cambio Climático,  
Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de México, México  
https://orcid.org/0000-0003-1905-2954  
37  
Saber vivir bien es un asunto de la Filosofía  
Filosofía y ciencias de la complejidad  
Knowing how to live well is a matter of  
PhilosophyPhilosophy and Sciences of Complexity  
Carlos Eduardo Maldonado  
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-9262-8879  
45  
Hacia una ética compleja: interdependencia, ciudadanía  
global y ética del cuidado  
Towards a Complex Ethics: Interdependence, Global  
Citizenship and Ethics of Care  
Miguel Ramón Viguri Axpe  
Facultad de Ciencias Sociales y Humanas, Universidad de Deusto,  
España  
https://orcid.org/0000-0002-0592-9711  
ResearcherID: X-6337-2019  
María Nely Vásquez Pérez  
Facultad de Teología del Norte de España, Sede de Vitoria, España  
https://orcid.org/0000-0002-0879-5309  
ResearcherID: AAA-8850-2019  
Javier Martínez Baigorri  
https://orcid.org/0000-0003-1457-0699  
ResearcherID: ABG-9031-2020  
Índice  
a gran interrogante que existe en la actualidad es la incertidumbre, que podemos admi-  
nistrarla empleando canales de comunicación y redes que permitan entender mejor el  
entorno; mejorando así el tratamiento de la información. En la presente edición, habla-  
L
mos sobre el buen vivir, cuya concepción filosófica comprende una transformación del mundo  
hacia el reencuentro de la salud de los sistemas. Este hecho denota la alegría de vivir, basado en  
la nutrición, adaptación, homeostasis y regeneración del entorno. El buen vivir fuera del área  
de la salud, es tratado por la ciencia económica, con una visión dirigida hacia el crecimiento y  
desarrollo económico. Articular la buena vida” deviene de una vida plena que se inserta en las  
relaciones sociales y en paz con la naturaleza, independientemente de una creciente disponibili-  
dad de recursos. Esto sostiene una verdadera forma de vida; que es constituida por la compresión  
del todo como un organismo vivo, dinámico y complejo.  
El buen vivir ha superado los enfoques convencionales de la calidad de vida, que está estrecha-  
mente vinculada con el desarrollo humano; está nueva forma de interrelación y cambio conti-  
nuo es impulsado por ciencias como la ecología, la biología, la complejidad, entre otras. Esta  
mismas, constituyen el desarrollo sostenible, el cual no está basado en la política económica  
como estrategia para mejorar las condiciones de vida en tiempos humanos; sino que traspasa un  
enfoque lineal y cuantitativo; no obstante, está caracterizado en tiempos biológicos que conlle-  
van a la construcción de redes sistémicas articuladas en la cultura, los estilos de vida y el cono-  
cimiento. Buscan regenerar el sistema a través del cambio interno y externo, acortando brechas  
de contaminación, pobreza, desigualdad, polución, enfermedad.  
Editorial  
El buen vivir, se traduce en la alegría de vivir que esta afianzada en la salud de los sistemas que  
no solo respecta a la vida humana, sino a la vida como: fenómeno complejo, capaz de transfor-  
marse, desencadenando estilos de vida en armonía con el entorno, reconstruyendo el medio.  
Glenn Arce Larrea  
EDITOR  
CC, Vol.2. N° 2: 7-15. https//doi.org/ 10.48168/cc022021-001  
Revisión conceptual del Buen  
Vivir desde la perspectiva de la  
complejidad  
Conceptual Review of Good  
Living from a Complexity  
Perspective  
Rodrigo Severo Arce Rojas  
Universidad Nacional de Ingeniería UNI, Lima, Perú  
Recepción: 12/10/2021  
Aceptación: 20/11/2021  
Resumen  
El presente artículo trata de la revisión del concepto del Buen Vivir desde la perspectiva de las ciencias de la  
complejidad y del pensamiento complejo. Para el efecto, se ha realizado una revisión bibliográfica especializada  
de la cual se concluye que el enfoque de complejidad, tanto desde la perspectiva de las ciencias de la compleji-  
dad como del pensamiento complejo, constituye una valiosa herramienta para la interpretación del concepto del  
Buen Vivir. Se reconoce un concepto que puede abordarse desde la perspectiva de sistemas complejos como de  
los fenómenos de la complejidad que aluden a la incertidumbre, los quiebres, las fracturas, las bifurcaciones, las  
singularidades y la borrosidad, entre otros. La convivialidad, la solidaridad y la complementación en el Buen Vivir  
tienen correspondencia con los principios de organización sistémica y recursividad. Como concepto religante de  
diversas propuestas regeneradoras, el Buen Vivir tiene el potencial para colocar en el debate y la práctica alter-  
nativas al desarrollo, las cuales reconozcan la necesidad de la reconexión del ser humano con la naturaleza de la  
que forma parte. En tal sentido, el Buen Vivir tiene el potencial de ofrecer alternativas a la megacrisis planetaria  
a la que nos ha llevado el antropocentrismo mercantilista.  
Palabras clave: Complejidad; Desarrollo; Naturaleza; Pensamiento complejo; Posdesarrollo.  
Abstract  
perspective of complex systems such as the phenom-  
ena of complexity that allude to uncertainty, breaks,  
This article deals with the review of the concept of fractures, bifurcations, singularities and blurriness,  
Good Living from the perspective of the sciences of  
complexity and complex thinking. For this purpose, a  
among others. Conviviality, solidarity and complemen-  
tarity in the Good Life correspond to the principles of  
specialized bibliographic review has been carried out. systemic organization and recursivity. As a religious  
From the reflection it is concluded that the complexity  
approach, both from the perspective of complexity sci-  
ences and complex thinking, constitutes a valuable tool  
for the interpretation of the concept of Good Living. It  
recognizes a concept that can be approached from the  
concept of diverse regenerative proposals, Good Living  
has the potential to place in debate and practice alter-  
natives to development that recognize the need for the  
reconnection of human beings with the nature of which  
they are a part. In this sense, Good Living has the po-  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
7
tential to offer alternatives to the planetary mega-crisis  
to which mercantilist anthropocentrism has led us.  
rrollo (ITESO, 2017; Vera, 2014). Tanto las ciencias de  
la complejidad como el pensamiento complejo permi-  
ten articular diversos saberes (Gonfiantini et al., 2020),  
por lo que constituyen valiosos soportes para tratar de  
entenderlo.  
Keywords: Complexity; Development; Nature; Com-  
plex Thinking; Postdevelopment.  
El presente artículo tiene como propósito contribuir  
al entendimiento del concepto del Buen Vivir desde la  
perspectiva de la complejidad. Para el efecto se ha rea-  
lizado una búsqueda bibliográfica especializada. La pre-  
gunta que ha guiado la revisión fue: ¿de qué manera el  
enfoque de complejidad aporta en la interpretación del  
1
.
Introducción  
Es indudable que la humanidad enfrenta una crisis  
civilizatoria que obliga a repensar el modo de vida de  
los seres humanos, que, empujados por una visión an-  
tropocéntrica y utilitarista, ha provocado severos im- concepto del Buen Vivir? En tal sentido, se han desa-  
pactos a la naturaleza y a la marginación y exclusión  
rrollado dos secciones: una para la revisión del marco  
social (Cardoso et al., 2016; Maldonado, 2020). Esta conceptual desde la perspectiva de las ciencias de la  
situación obliga a revisar los marcos epistemológicos,  
ontológicos, teóricos y metodológicos que explican  
cómo ha sido posible llegar a esta situación delicada  
para el planeta y la propia viabilidad humana como es-  
pecie.  
complejidad y otra desde el enfoque del pensamiento  
complejo.  
2. Resultados  
2.1.  
De esta forma, la humanidad ha creado el concep-  
to aspiracional del desarrollo, asociado fuertemente a  
la idea de progreso determinista y al crecimiento eco-  
nómico. La insistencia en su aplicación convulsiva ha  
llevado al desarrollismo; su mala aplicación e incom-  
prensión, al maldesarrollo y a la necesidad de ir más  
allá de sus valores antropocéntricos, materialistas y  
utilitaristas, a plantear propuestas enmarcadas en las  
alternativas al desarrollo. Dentro del conjunto de opcio-  
nes que buscan ir más allá del desarrollo se encuentra  
el concepto de Buen Vivir.  
El concepto emergente del Buen Vivir, desde el cons-  
titucionalismo andino, no se reduce a países como Bo-  
livia, Ecuador y Perú, pues su espíritu o aire de familia  
conceptual y de sentir se encuentra en diversos pueblos  
indígenas de América Latina (Abya Yala) y del mundo  
que apelan a lograr la armonía y la plenitud de vida.  
En su actual conceptualización es posible identificar a  
indígenas y proindígenas desde las vertientes sociales  
y políticas, así como corrientes que no se reconocen  
como indigenistas desde los ámbitos ambientalistas,  
socialistas y de la teología de la liberación (Belotti,  
El abordaje de la realidad socioecológica del Buen  
Vivir encuentra en la complejidad un marco episté-  
mico de primer orden para entenderlo mejor; así,  
considera “la visión holista, la unidad en la diversi-  
dad, lo integral de los procesos y la vida, los princi-  
pios de la complejidad de lo social” (ITESO, 2017, p.  
8). Como señala Cardoso y colaboradores (2016, p.  
8), en el Buen Vivir se reconoce que somos múlti-  
ples, diversos, pero iguales.  
La complejidad, a diferencia de la epistemolo-  
gía que fragmenta, apela a la síntesis (Maldonado,  
2015a). Se encuentra que el Buen Vivir es un con-  
cepto síntesis desde la filosofía andina, el ambienta-  
lismo y el socialismo. Adicionalmente el Buen Vivir  
es un concepto síntesis entre el trabajo, el equilibrio,  
la armonía, la creatividad, la serenidad y el saber  
ser, entre otros (Vera, 2014).  
La complejidad, desde la perspectiva de las cien-  
cias de la complejidad, es el estudio de la vida y de  
los sistemas vivos. El concepto del Buen Vivir apela  
profundamente a la vida, pero no solamente la vida  
humana, sino también a la vida no-humana e inclu-  
so se extiende a lo que Occidente considera inerte,  
como las montañas, los ríos, el cosmos. En tal direc-  
ción se podría decir que el concepto de Buen Vivir  
es organicista, por lo que se reconoce dentro del  
panpsiquismo. A contrapelo de lo que se podría pen-  
sar como rezago de un pensamiento animista ana-  
crónico, la ciencia demuestra que cada vez es más  
difícil distinguir lo vivo de lo no-vivo, lo orgánico de  
lo inorgánico, lo biótico de lo abiótico. Es la civiliza-  
ción occidental la que desde el neolítico ha construi-  
do socialmente el concepto de que el ser humano  
es distinto, distante y superior respecto de la natu-  
2
014). Cada tendencia pugna por darle su sello sin que  
exista una propuesta aceptada por todos. Hay incluso  
grupos que niegan la existencia real del Buen Vivir y  
lo conciben más bien como un collage de aspiraciones  
utópicas.  
Existen muchas dificultades para entender y explicar  
el Buen Vivir desde la epistemología reduccionista de la  
ciencia caracterizada por ser disyuntiva, reductiva, me-  
canicista, lineal, determinista, legalista, además de ser  
colonialista y patriarcal (Estrada, 2018; Vera, 2014). El  
concepto del Buen Vivir puede ser interpretado desde  
la complejidad, el pensamiento complejo y el biodesa-  
8
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
raleza. Pero esta constatación también señala que  
no existe una línea evolutiva determinista que cada  
vez vaya definiendo etapas superiores a las anterio-  
res; por el contrario, esta forma de abordaje de la  
realidad demuestra la circularidad del tiempo, aun-  
que también se podría decir que presenta una figura  
espiralada que se ubica multidimensionalmente con  
cruces y bifurcaciones (Maldonado 2016a; 2016b;  
cada situación particular. De ahí que acertadamente  
se señala que, más que hablar de Buen Vivir, lo más  
apropiado sería hablar de Buenos Vivires.  
La complejidad está interesada por las múltiples  
posibilidades e incluso por las imposibilidades (Mal-  
donado, 2016b). Quienes critican el concepto de  
Buen Vivir señalan que es vacuo, gaseoso y que es  
una propuesta utópica no acorde con el ritmo ver-  
tiginoso y pragmático de los tiempos. Frente a un  
mundo que valora la velocidad, la eficacia y la efi-  
ciencia, el concepto de Buen Vivir no busca la acu-  
mulación, el éxito personal, el consumo desenfre-  
nado; por ello, desde la perspectiva que dan esos  
valores, habrá quienes lo consideran solo un ideal de  
buenos deseos que no se condice con los “factores  
de éxito” que la sociedad capitalista ha construido.  
En tal sentido, su fuerza inspiradora también tiene  
que ver con la búsqueda de “los imposibles”, es de-  
cir, de los diversos futuros posibles.  
La complejidad está muy interesada en el estudio  
de las crisis, aquellas que ya llegaron, las que están  
por venir e incluso las que nunca llegarán (Maldo-  
nado, 2015b). El concepto del Buen Vivir cobra re-  
levancia precisamente porque llega en un momento  
en el que atravesamos por una gran crisis civiliza-  
toria con efectos que ya sentimos y vivimos, con  
efectos previsibles que vendrán más adelante y con  
efectos que aún no podemos avizorar.  
2018; 2019a; 2019b).  
La complejidad está interesada en el estudio  
de los eventos raros, singulares o particulares que  
presentan comportamientos extraños, irregulares e  
irreversibles (Maldonado, 2016c). En tal sentido, el  
concepto de Buen Vivir se ajusta a esta situación  
ya que se resiste a la determinación, a la defini-  
ción precisa y certera, como se esperaría desde la  
racionalidad objetivista. Desde la perspectiva del  
pensamiento complejo, se busca comprender y ex-  
plicar los fenómenos que no se han visto o no han  
querido ser vistos en la pretensión de ir más allá de  
lo conocido. Como señala Arturo Vera: “La Compleji-  
dad saca a la luz, características antes negadas, que  
ahora más que nunca es importante considerar por  
su innegable existencia: la incertidumbre, el desor-  
den, el caos, la contradicción, el antagonismo y la  
aberración” (2014, p. 113).  
La complejidad del concepto del Buen Vivir viene  
desde el origen, desde su ubicación, alcance y mar-  
co temporal, desde las vertientes que aportan a su  
formulación y proyecciones de implementación. El  
significado borroso del concepto es una debilidad al  
mismo tiempo que una fortaleza, porque le permite  
absorber múltiples posibilidades, responder a las rea-  
lidades contextuales, adaptarse y evolucionar según  
La complejidad puede abordarse desde dos pers-  
pectivas: una de ellas planteada desde lo sistémico  
y otra que se ocupa de la realidad más allá estable-  
cida de la media, de la estandarización, de la nor-  
malización o protocolización y que por tanto da  
pie a los quiebres, las fracturas, los intersticios, los  
Con uno  
mismo  
Con el  
cosmos  
Con la  
sociedad  
Convivencialidad  
armónica como  
fundamento del  
Buen Vivir  
Con los  
espíritus y  
las  
Con la  
naturaleza  
deidades  
Figura 1. La convivencialidad armónica como fundamento del Buen Vivir  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
9
azares, aleatoriedades, las contingencias, las fluc-  
tuaciones, las bifurcaciones, entre otras manifesta-  
ciones de la complejidad.  
perspectiva del pensamiento complejo, se toma  
como punto de partida los once principios presenta-  
dos por Morin (2004) y recopilados por Acevedo et  
al. (2020) y Arce (2021).  
El enfoque sistémico está muy presente en el con-  
cepto del Buen Vivir en tanto mirada holística, unita-  
ria, que da cuenta de los diferentes componentes del  
sistema que se encuentran altamente interrelaciona-  
dos. Aunque no se alude directamente al concepto de  
sistema, la idea está presente. Consecuentemente,  
también es posible reconocer el entorno. Así, es po-  
sible identificar la continuidad persona-familia-comu-  
nidad-sociedad-especie humana-naturaleza-cosmos  
en doble direccionalidad, desde la persona hasta lle-  
gar al cosmos y desde el cosmos hasta llegar a la per-  
sona, aunque cabe aclararla figura de persona,  
sin desconocerla, no es central sino la comunalidad  
2.2.1. Principio sujeto-objeto (reintroducción del  
cognoscente en todo conocimiento)  
La relación entre los seres humanos y la natura-  
leza es entre sujetos y no de sujeto-objeto (Acosta,  
2014). En el Buen Vivir el acto de conocer, que no se  
reduce a la racionalidad, alude a la cotidianidad de  
la convivencia en todos los planos.  
2.2.2. Principio sistémico u organizativo  
(
que se entiende incluye a las familias). La figura 1  
Cubillo y colaboradores (2016, p. 35) afirman  
que el concepto de Buen Vivir es “un collage post-  
moderno de concepciones indígenas, campesinas,  
sindicalistas, cooperativistas, solidarias, feministas,  
pacifistas, ecologistas, socialistas, decolonialistas,  
teólogo-liberacionistas, etc.”. Consecuentemente,  
revela su carácter de síntesis.  
El Buen Vivir alude a una concepción holística y  
plural constituida por elementos tangible e intangi-  
bles (Acosta, 2014; Gudynas, 2014). Valora la di-  
versidad y respeta al “Otro” (Acosta, 2014). Como  
mencionan Cardoso y colaboradores “[p]ara el Buen  
vivir es necesario el reconocimiento de todos y de  
todo, es decir, admitir que somos múltiples y diver-  
sos pero iguales, por lo que las sociedades deben  
aceptar su naturaleza pluriétnica e intercultural”  
(2016, p. 8). En tal sentido, se apela a la unidad  
(ITESO, 2017) y al equilibrio interno y externo de  
una comunidad (Macas, como es citado en Rocha,  
2020). Este equilibrio se manifiesta en todos los ni-  
veles de vida y de la naturaleza (Vera, 2014).  
El concepto de Buen Vivir refiere a una relación  
armoniosa entre el ser humano (el individuo, la fa-  
milia, la comunidad) y la madre tierra (Acosta, en  
entrevista con Fernández, 2014; cfr. también Be-  
lotti, 2014; Houtart, 2014; Noguera, 2020; Vera,  
2014), alcanzando incluso hasta el cosmos (Acosta,  
2014). Se aclara que el sentido de comunidad abar-  
ca lo humano y lo no-humano, como “ciertos ani-  
males, plantas, montañas, rocas” (Gudynas, 2014,  
p. 86) o “la tierra, los bosques, los ríos y lagunas”  
(Cardoso et al., 2016, p. 7). Asimismo, incluye “a los  
antepasados, los difuntos, las futuras generaciones,  
el mundo espiritual y lo divino” (Estermann, 2013,  
p. 10). Estas interacciones contienen la relación per-  
sonas-familia-sociedad-naturaleza-cosmos (Cardo-  
so et al., 2016; Houtart, 2014). La vida armoniosa  
muestra la convivencialidad armónica como funda-  
mento del Buen Vivir.  
La dinámica alejada del equilibrio de la comuna-  
lidad humana, aunque se reconoce otros tipos de  
comunalidades, se puede verificar en las relaciones  
de colaboración, solidaridad y reciprocidad que re-  
suelven el juego de la entropía social y su respecti-  
va neguentropía (o sintropía). De estos procesos de  
autoorganización se espera que emerjan los valores  
de felicidad, alegría y plenitud existencial.  
2
.2. El Buen Vivir desde la perspectiva del pensa-  
miento complejo  
El pensamiento complejo incorpora una perspec-  
tiva integradora de las diversas fuentes y vertientes  
del conocimiento. Esta no se reduce únicamente a lo  
racional, sino que apela a la pluralidad de manifesta-  
ciones propias de las características del ser humano,  
reconocido como ente biopsicosocial que actúa en  
un ambiente dado.  
Desde el pensamiento complejo se mencionan los  
principios de dialogicidad y recursividad. En el con-  
cepto de Buen Vivir este diálogo se verifica entre  
diferentes dimensiones, planos y categorías tangi-  
bles e intangiblesen los que el encuentro da cuenta  
de la recursividad a modo de bucle. Aquí es posible  
inscribir la crianza mutua de la filosofía andina en la  
que el ser humano cría a la naturaleza y la naturaleza  
cría al ser humano. En esta perspectiva, es impor-  
tante entender que la naturaleza como cielo, como  
luna, como plantas o animalesle habla al hombre  
y mujer andinos, y a través de señas indica cuándo  
sembrar o cosechar. Así, los rituales constituyen una  
forma de comunicación (Palomino y Ojeda, 2016).  
Para la interpretación del Buen Vivir, desde la  
1
0
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
hace referencia a conceptos clave como conviven-  
cialidad, solidaridad y reciprocidad (Acosta, 2014;  
Bretón et al., 2014; Gudynas, 2014). Según Cubillo  
et al. (2016), la búsqueda de armonía integral pue-  
de reconocerse como compatible con la orientación  
de sostenibilidad.  
nos y no-humanos (Acosta, 2014, p. 39); entre los  
seres humanos, los dioses y los espíritus protectores  
de las vidas existentes en la Pachamama (Cardoso  
et al., 2016, p. 6). La crianza mutua entre el ser  
humano y la naturaleza es una manifestación de re-  
troalimentación.  
El concepto de Buen Vivir incluye una concepción  
no-lineal del tiempo, la vida y la historia (Acosta,  
2.2.5. Principio de autonomía/dependencia (au-  
to-eco-organización, auto-eco-explicación)  
2
014; Gudynas, 2014; Hidalgo y Cubillo, 2014) que  
se pone de manifiesto en el principio andino de ci-  
clicidad (Cardoso et al., 2016; Estermann, 2013).  
Desde la perspectiva del Buen Vivir, el “‘futuro real’  
se encuentra en el ‘pasado’ que tenemos por de-  
lante” (Estermann, 2013, p. 11). No busca ni re-  
presenta soluciones únicas, por lo que se identifica  
que es más apropiado hablar de Buenos Vivires, re-  
conociendo las múltiples posibilidades contextuales  
En el concepto del Buen Vivir se reconoce la in-  
dividualidad y la identidad personal (Cubillo et al.,  
2016), pero no se reduce a ellas porque se hace  
referencia al valor de la comunalidad ampliada que  
no se circunscribe a los humanos, sino que incluye  
a la naturaleza, los espíritus y las deidades, e inclu-  
so al cosmos. De esta manera, el ser humano está  
estrechamente interrelacionado con la naturaleza y  
el cosmos en convivencia (Estermann, 2013) en el  
marco del derecho a la relacionalidad con la Madre  
Tierra (Huanacuni, 2010).  
(Cubillo et al., 2014). De tal manera, la cosmovisión  
andina está abierta a la creatividad (Vera, 2014).  
2
.2.3. Principio dialógico o de dialogización  
La dialogicidad en el Buen Vivir es una de sus  
principales características, y se emparenta con los  
principios andinos de dualidad y complementarie-  
dad. La crianza mutua en el mundo andino “implica  
conversación, diálogo, entendimiento, pactos, nego-  
ciaciones, reciprocidades, intercambios y acuerdos  
entre entes humanos y no humanos” (Lema, 2013,  
s. p). En la cosmovisión andina no se niegan las con-  
tradicciones (Houtart, 2014).  
2.2.6. Principio de recursividad organizacional (re-  
cursión, causalidad en bucle, retroalimentación)  
El Buen Vivir es expresión de los principios de  
la filosofía andina que aluden a la corresponden-  
cia, complementariedad, reciprocidad y ciclicidad  
(Acosta, 2011; Acosta, 2014; Cubillo et al., 2016;  
Estermann, 2013). Es necesario reconocer que la  
complementariedad parte del reconocimiento de la  
dualidad o diarquía propia de la cosmovisión andina  
(Vera, 2014).  
Las manifestaciones del diálogo se verifican entre  
el individuo y la sociedad; entre los conocimientos  
científicos y los conocimientos y saberes ancestrales  
(diálogo de saberes); entre saberes y sensibilida-  
2.2.7. Principio de emergencia  
des (Bretón et al., 2014); entre las generaciones  
presentes y futuras; entre elementos materiales y  
la afectividad y la espiritualidad (Gudynas, 2014, p.  
El propio concepto de Buen Vivir se podría re-  
conocer como emergente desde la confluencia de  
diversas vertientes de pensamiento, historias y con-  
textos socioculturales.  
8
4); entre lo humano y lo no-humano; entre la co-  
munidad feliz y el ecosistema feliz (Houtart, 2014);  
entre tradición y modernidad (Acosta, 2011); entre  
el estrato de arriba y el estrato de la cotidianidad  
aquí y ahora (Estermann, 2016).  
2.2.8. Principio holográfico (hologramático)  
Todo ello plantea recrear la interculturalidad (Cu-  
billo et al., 2016; Houtart, 2014), así como relación  
entre la autosuficiencia y el mercado (Stefanoni,  
A partir de la alusión a la relacionalidad como  
fuente central del Buen Vivir se podría colegir que,  
aunque no se la mencione explícitamente, es una  
forma de decir que el todo está en la parte y la par-  
te está en el todo y que “un cambio en una parte  
conlleva necesariamente un cambio correspondiente  
en las demás partes” (Estermann, 2013, p. 6). Para  
la filosofía andina, el macrocosmos se refleja en el  
microcosmos y el microcosmos se refleja en el ma-  
crocosmos (Estermann, 2013).  
2
014). Alude, por tanto, al proceso de negociación y  
consenso (Acosta, 2011).  
2.2.4. Principio de retroalimentación  
Es por el que se acepta la relacionalidad y com-  
plementariedad entre todos los seres vivos, huma-  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
11  
2.2.9. Principio de incertidumbre  
3. Discusiones  
Al plantear “una cosmovisión diferente a la occi-  
dental al surgir de raíces comunitarias no capitalis-  
tas”, rompe por igual “con las lógicas antropocéntri-  
cas del capitalismo en tanto civilización dominante  
y también de los diversos socialismos realmente  
existentes hasta ahora” (Acosta, como es citado por  
Bretón et al., 2014).  
Se ha podido encontrar que el concepto de Buen  
Vivir da cuenta de muchas paradojas y cuestiones an-  
titéticas que se ubican entre el orden y el caos: entre  
el discurso oficial (en el caso de Bolivia y Ecuador) y la  
práctica, entre la narrativa de sus promotores externos  
y la de los propios actores involucrados en la cotidiani-  
dad, entre la idealización y la materialidad andina, en-  
tre el esencialismo y el realismo, entre el desarrollismo  
y el antidesarrollo, entre el mercado y el antimercado,  
entre otras ambivalencias (Bretón et al., 2014).  
2
.2.10. Principio borroso  
Como señala Bretón y colaboradores (2014, p.  
7) [...] sumak kawsay y buen vivir son conceptos  
Aunque el Buen Vivir aparece como un concepto  
alternativo al desarrollo, en la práctica se encuentran  
1
poliédricos, ambivalentes, vaporosos y difíciles de expresiones que podrían calificarse como premoder-  
concretar; convergentes o divergentes según el uso  
ideológico y político que se haga de ellos…”. Andreu  
Viola (2014) destaca su indefinición conceptual, am-  
bigüedades e imprecisiones, por lo que según él nos  
encontramos ante un caso de “tradición inventada”  
nas, modernistas y posmodernistas con fronteras po-  
rosas (Hidalgo y Cubillo, 2014). Como señalan Mónica  
Chuji, Grimaldo Rengifo y Eduardo Gudynas en el libro  
Pluriverso. Un diccionario del posdesarrollo: “La cate-  
goría del Buen Vivir o Vivir Bien expresa un conjunto de  
perspectivas sudamericanas que comparten cuestiona-  
mientos radicales al desarrollo y otros componentes de  
la Modernidad, y a la vez ofrecen alternativas más allá  
de esta” (2019, p. 188).  
2
.2.11. Principio caórdico  
El concepto transita entre los fundamentos de la  
filosofía andina y el discurso políticamente interesa-  
do (Bretón et al., 2014).  
Por lo tanto, según los contextos específicos, las  
denuncias y respuestas tendrán sus particularidades,  
Desarrollismo  
Capitalismo  
Posdesarrollo  
Poscapitalismo  
Descolonización  
Despatriarcalización  
Comunalidad  
Colonialismo  
Patriarcado  
Denuncias y respuestas  
El Buen Vivir como  
concepto  
Individualismo  
Antropocentrismo  
Materialismo  
Biocentrismo  
Reconocimiento de los  
valores inmateriales  
Figura 2. Denuncias y respuestas en la conceptualización del Buen Vivir  
1
2
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
por lo que el concepto queda abierto a otras perspecti-  
vas emparentadas (Acosta, 2014). Es importante tener  
presente que el concepto de Buen Vivir no alude a una  
sociedad andina enclavada en el tiempo y en el espacio,  
la cual también ha sido sometida a las influencias del  
pensamiento occidental y del mercado (Belotti, 2014).  
Ahora bien, es necesario señalar que para algunos el  
Buen Vivir no es motivo de conceptualización porque  
más bien se trataría de una cosmovisión y de una pro-  
puesta de modo de vida (Cardoso, et al., 2016). Por su  
parte Eduardo Gudynas (2011) pone de manifiesto las  
dificultades para arribar a una definición única, en tanto  
un concepto plural deberá responder a los contextos  
específicos. La figura 2 muestra las denuncias y res-  
puestas en la conceptualización del Buen Vivir.  
Vivir, con su carácter aglutinante de posiciones con-  
trahegemónicas, lo “desordena todo” ratificando su rol  
contestatario (Belotti, 2014).  
Más que un concepto-herramienta, el Buen Vivir  
aparece como un concepto inspiracional y aspiracional.  
Puede servir de guía para que los diversos pueblos re-  
flexionen sobre los valores que deben guiar su pensar,  
sentir, actuar y hablar, tomando en cuenta las tensiones  
que se generan entre la materialidad y la espiritualidad,  
entre el idealismo y el pragmatismo, entre la aspiración  
de autonomía y la necesaria interdependencia con rea-  
lidades sociopolíticas y económicas, entre las legítimas  
necesidades personales, familiares y locales, y las exi-  
gencias planetarias que la época exige. Según los dife-  
rentes procesos históricos y contextuales, no hay una  
única manera de caracterizar, describir, vivir o sentir el  
Buen Vivir.  
Una de las características del Buen Vivir refiere a  
la no-linealidad, que lo diferencia de las versiones de-  
terministas de la ciencia normal. La concepción circu-  
lar del tiempo del Buen Vivir “[...] no es un paradigma  
en retroceso, más bien es un cambio en la manera de  
comprender el tiempo, de experimentar, construir el  
espacio y apreciar la vida” (Bravo, et al., 2019; como  
es citado en Gonfiantini et al., 2020, p. 861).  
Se reconoce que el concepto del Buen Vivir es una  
categoría dinámica que está en permanente construc-  
ción, deconstrucción, reproducción y reconstrucción  
(Acosta, 2014; Rocha, 2020); es decir, es un concepto  
en constante transformación. Según Francesca Belot-  
ti (2014), da cuenta de su carácter abierto, poroso y  
plástico que al ser su fortaleza también lo debilita por-  
que aparece como polisémico, ambiguo; ello, de acuer-  
do con Andreu Viola (2014), implica que lo puede vaciar  
de contenido. No obstante, aun cuando recoge diferen-  
tes vertientes de pensamiento, se caracteriza por tener  
una identidad (Cubillo et al., 2016), y el hecho de que  
sea un concepto abierto permite visualizar un camino  
La apuesta por la vida en todas sus manifestaciones  
es uno de los aspectos controversiales del Buen Vivir,  
que coincide con la propuesta de biodesarrollo. El res-  
que debe ser imaginado para ser construido (Acosta, peto del valor intrínseco de la vida genera posiciones  
2
014, p. 36).  
encontradas porque significa cambiar los fundamentos  
del modelo civilizatorio en el que ha sido muy cómodo  
para el ser humano adscribir la posición antropocén-  
trica utilitarista que considera que la naturaleza puede  
Usandola metáfora de Edgar Morin (1977), se podría  
decir que el concepto de Buen Vivir recoge el espíritu de  
la naturaleza en el cual convergen diferentes vertien-  
tes. También se podría sostener, revisando la crítica, y debe ser aprovechada, manejada o explotada se-  
que “es una tradición inventada”, que es una hermosa  
gún sea el casode acuerdo con su conveniencia. La  
ficción que el mundo necesitaba para dar respuestas al  
cosificación de la naturaleza favorece su apropiación y  
desarrollismo y al maldesarrollo (Bretón et al., 2014; dominación.  
Cardoso et al., 2016). Asimismo, aparece como un con-  
tenedor teórico que une vertientes de la filosofía andina  
con influencias de conceptos de la institucionalidad so-  
ciopolítica y aspiraciones de la cooperación internacio-  
nal (Belotti, 2014). Sin embargo, un concepto que trata  
de explicar todo finalmente puede que no exprese nada  
porque es imposible conocerlo todo (Vera, 2014).  
Para las ciencias de la complejidad y para el pensa-  
miento complejo el concepto de Buen Vivir es un gran  
reto, entendido como tema de frontera que se resiste a  
determinaciones y mecanismos de control. Es propósito  
de las ciencias de la complejidad indeterminar, desequi-  
librar, desestabilizar los conceptos precisamente para  
escapar de lo establecido, lo instituido, lo instituciona-  
lizado, lo protocolizado, y así poder ver la realidad más  
allá de la media. En tal sentido, el concepto de Buen  
Otra cosa es cuando el respeto por el valor intrínse-  
co de la vida empieza a colisionar con la satisfacción de  
necesidades vitales como la alimentación y la genera-  
ción de ingresos económicos a partir de la mercantiliza-  
ción de la naturaleza. Entonces es posible que puedan  
aparecer tensiones entre los derechos humanos, inclu-  
yendo los derechos indígenas y los derechos de la natu-  
raleza. En una posición de estrecha interrelación entre  
el ser humano y la naturaleza, se supone que existe un  
igualitarismo biocéntrico.  
No obstante, se presentan contradicciones como  
“el acceso a los recursos naturales”, “los derechos de  
redistribución de beneficios producto de la explotación  
de los recursos naturales” o las compensaciones que  
reciben los seres humanos por la afectación al daño  
de los ecosistemas. El problema estriba en que estas  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
13  
propuestas ya están legitimadas en el marco legal y en  
las agendas políticas de las organizaciones indígenas,  
por lo que cuestionarlas resulta políticamente incorrec-  
to. Aunque todos estos derechos son legítimos, consti-  
tuyen una forma de relación transaccional en la que el  
ambiente aparece como un actor pasivo y es una forma  
de bajar el grado de exigibilidad de consideraciones so-  
ciales y ambientales.  
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4.  
Conclusiones  
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El enfoque de complejidad, tanto desde la perspec-  
188-192). Barcelona: Editorial Icaria.  
tiva de las ciencias de la complejidad como del pensa-  
miento complejo, constituye una valiosa herramienta  
para la interpretación del concepto del Buen Vivir. Se  
reconoce un concepto que puede abordarse desde la  
perspectiva de sistemas complejos, como de los fenó-  
menos de la complejidad que aluden a la incertidum-  
bre, los quiebres, las fracturas, las bifurcaciones, las  
singularidades y la borrosidad, entre otros. La convivia-  
lidad, la solidaridad y la complementación en el Buen  
Vivir tienen correspondencia con los principios de orga-  
nización sistémica y recursividad.  
Como concepto religante de diversas propuestas re-  
generadoras, el Buen Vivir tiene el potencial para colo-  
car en el debate y la práctica alternativas al desarrollo  
que reconozcan la necesidad de la reconexión del ser  
humano de la naturaleza de la cual forma parte. De  
esta forma, el Buen Vivir tiene el potencial de ofrecer  
alternativas a la megacrisis planetaria a la que nos ha  
llevado el antropocentrismo mercantilista.  
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CC, Vol.2. N° 2: 17-23. https//doi.org/ 10.48168/cc022021-002  
Mimesis y mediaciones  
bien vividas  
Mimesis and mediations well  
lived  
Juan Richar Villacorta Guzmán1  
https://orcid.org/ 0000-0001-9892-0734  
CIET (Centro de Investigación y estudios Transdisciplinares)  
Escuela Militar de Ingeniería - Bolivia  
Recepción: 22/09/2021  
Aceptación: 30/11/2021  
Resumen  
Se presenta una lectura desde el campo de las Ciencias de la Religión, en una aproximación educativa de lo que  
se llama en América Latina: Teología y economía, el sustento está en las Ciencias Sociales para desde allá realizar  
un acercamiento sustentado en la propuesta de Girard y la apropiación de las mediaciones.  
Es un texto que busca ante todo provocar una lectura crítica hermenéutica del fenómeno del “Vivir bien”, el cual  
permita entender el proceso histórico y la praxis de los pueblos, principalmente el boliviano,  
No se busca dar respuestas, pero si tener una postura crítica la cual ayude a quitar el aire soteriológica y es-  
catológico con el cual se rodean las nuevas propuestas idolátricas, sean estas de una mirad ad intra o ad extra.  
Es un texto parte de la reflexión, sigue una especie de secuencia histórica desde una aproximación teórica  
práctica, coherente con el pensar y hacer del autor, desde su aproximación compleja y transdisciplinar, se plantean  
ideas que promuevan distintos puntos de vista o un acercamiento hologramático.  
Palabras clave: Mimesis, vivir bien, mediaciones, idolatría  
Códigos JEL: I29 y Z12  
Abstract  
A reading is presented from the field of Religious  
Sciences, in an educational approach of what is called in  
Latin America: Theology and economy, the support is in  
the Social Sciences in order to make an approach based  
on Girard’s proposal and the appropriation of mediations.  
It is a text that seeks above all to provoke a criti-  
cal hermeneutic reading of the phenomenon of “Living  
Well”, which allows to understand the historical process  
and the praxis of the peoples, mainly the Bolivian,  
It does not seek to give answers, but to have a criti-  
cal stance which helps to remove the soteriological and  
eschatological air with which the new idolatrous propo-  
1
Es un soñador desde nuestra Patria y matria Grande, pasa por sus venas sangre quechua y aimara, pero por encima de eso se  
siente un ciudadano de un país sin fronteras. Paso por la filosofía, la teología católica, la metodista, las distintas ciencias que le  
llevaron a trabajar el ámbito de lo complejo desde lo educativo. En la actualidad es Coordinador del programa doctoral y Posdoctoral  
de la Escuela Militar de Ingeniería en Cochabamba Bolivia.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
17  
sals are surrounded, whether they are from an ad intra  
or ad extra viewpoint.  
Tal acercamiento permitió comprender la presencia  
de algunos elementos centrales sustentados en criterios  
Itisa textpartofthe reflection, itfollows a kind ofhis- de pertenencia, los cuales a su vez se van complemen-  
torical sequence from a practical theoretical approach, tando en la explicitación de distintos momentos, que  
coherent with the thinking and doing of the author, from se convierten en delimitación de los espacios que dife-  
his complex and transdisciplinary approach, ideas that rencian entre lo sagrado y lo “profano” (Eliade, 1992),  
promote different points of view or a hologrammatic pero que a su vez nos ayudan a ubicar las distintas es-  
approach are raised.  
tructuras (Lévi-Strauss, 1988) las cuales juegan en una  
primera instancia con la casualidad, pero que convive  
con la causalidad.  
Keywords: Mimesis, living well, mediations, idolatry  
Códigos JEL: I29 y Z12  
Desde dicha perspectiva, se trabajo un proceso her-  
menéutico fenomenológico, elemento metodológico im-  
portante para análisis que impliquen las mediaciones  
socio-analíticas, hermenéuticas y práxicas en el ámbito  
1. Introducción  
Al momento de aceptar el desafío de escribir el pre- del compromiso social, será en dicha perspectiva que se  
sente artículo creí que tenía todo claro, me acuso de maneja el concepto de Liberación, el cual cuenta con un  
que haberme equivocado, pues es uno de los textos elemento central llamada “democracia”, es a partir de  
mas tensos e intensos que me toco escribir de un tiem- dicha palabra que se concentra la experiencia de Amé-  
po a esta parte.  
rica Latina.  
Ya en un contexto mucho mas amplio, en torno a  
Marcan el presente caminar dos palabras de Hugo  
3
Assmann: Creavivir y sentipensar, elementos que me los 500 años o 500 engaños con lo cual se difunde en  
permitieron respetar a nuestros pueblos, pero también América latina un proceso de concientización en torno  
tener una postura critica desde una lectura que pasa a la situación de pobreza, pero también emerge el ros-  
entre la Ciencias de la Religión, la Sociología, la antro- tro del indígena, el cual busca hacer emerger un rostro  
pología, la educación y otros saberes de lo cotidiano.  
diferente poco pensado o manejado desde la presencia  
La primera intención fue llenar de citas bibliográfi- de los. Oprimidos, es así comienza a descubrirse el en-  
cas, la segunda hacerla de manera dialogal, se intento cubrimiento.  
combinar ambas para poder argumentar desde una ca-  
minada por y entre los pueblos tal como tuve la suerte los pueblos debe emerger como elemento central, para  
de poder realizar.  
ello se recupera elementos como pachamama, el quet-  
Agradezco la invitación, tras el texto están las mas zal, quetzacoatl,…  
En dicho encubrimiento, se percibe que el rostro de  
variadas experiencias variopintas de un continente con  
su contenido.  
Desde ahí, la nueva lectura comienza con una parti-  
cipación en una serie de momentos, desde las ciencias  
de la religión esta el término ritos, para diferenciar de  
las “celebraciones” de las expresiones religiosas esta-  
blecidas, por lo cual lo que se plantea ante todo es el  
conocer y participar de los distintos momentos de los  
pueblos, buscando transmitir su presencia en medio de  
momentos de equilibrio, complementariedad, quiebre  
con el “orden establecido”, es decir, se presenta a la na-  
turaleza desde un criterio de “cosmos” (orden), el cual  
se manifiesta hasta que se de el pachacuti final, ele-  
mento que marca el “pedigrí” de lo nuevo y antiguo de  
los pueblos de América Latina y de Bolivia en particular.  
Es decir, que se busca sustentar conceptos, ideas y  
2.  
Buscando el pedigrí  
Desde la experiencia de los pueblos andinos, uno  
aprende que “la tierra no da así no más” (Van den Berg,  
989), entonces la búsqueda pasa al intento de enten-  
1
der la esencia de los pueblos andinos, principalmente  
de aquellos pueblos con la característica de ser parte de  
los pueblos aimaras, además de estar dentro el espacio  
geográfico de las tierras semicalientes (Yunkas = yun-  
2
gas) , labor que ayudó entender las distintas propues-  
tas en torno a la identidad en primera instancia de los  
pueblos andinos, su variada presencia y su constitución propuestas pues como se decía:  
sustentada en una cosmovisión, la cual es en muchos  
casos seudo uniformizada.  
“No creemos en Políticos ni en teorías económi-  
cas acuñadas en tan recónditos lugares... Noso-  
tros creemos en el Llankay (la labor) y en nuestro  
Ayllu (comunidad).  
2
Son las tierras ubicadas en sector intermedio entre las alturas  
del de los Andes y la bajada hacia las llanuras, existiendo en  
torno a ella mucha literatura. Veáse por ejemplo: Spedding,  
A. (1994). Wachu wachu: cultivos de coca e identidad en los  
Yungas de La Paz.  
3
a por Jose y Maria Lopez de Vigil, en base a Galeano, E.  
Las venas abiertas de América Latina.  
radiofóni  
ca  
producid  
1
8
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
El Tawantinsuyu se hizo haciendo, no hablando. de identidad, la cual se halla presente.  
El que quiere hablar, que hable con las manos..”  
Desde la antropología se había insertado la palabra  
Wiñay Qhapac Masaquiza)  
(
“raza”, pero poco a poco se dará un salto al criterio de  
originarios, como anécdota se puede percibir en Bolivia  
La propuesta propone una inserción en medio de las el salto de “colonizadores” o colonos, que se atribuía a  
comunidades las cuales tienen su “sabiduría siendo di- los migrantes de tierras altas. Hacía tierras bajas, por el  
cha sabiduría la que nos permite visibilizar los rostros de “interculturales”, los cuales toman ese rol de expan-  
concretos e identificar las grandes bondades de nues- sión y presencia ante el nuevo minifundio de las tierras  
tros pueblos que permanecen por encima de tiempos del altiplano, que va convirtiéndose en huacho fundio  
y espacios, es interesante observar que el concepto de (surco fundio) neologismo para mostrar como el criterio  
ubicación espacio temporal no entra en discusión como de posesión de la tierra iba cambiando debido al creci-  
tal, sino que se halla basada desde opciones genéricas, miento demográfico, en base a dicho elemento es que  
pues lo importante es la vuelta a las raíces propias que se da la necesidad de otros tipos de posesión, para lo  
habían sido acalladas por 500 anos.  
cual se mantiene o recupera los criterios comunitarios  
Es decir ya cerrando esta primera parte el concepto de la propiedad de la tierra, pero estos a su vez man-  
de pureza y de garantía parte de un ideal de pertenen- tienen una idea de posesión que no necesariamente  
cia, coherencia y mantenimiento de las voces origina- coincide con la propuesta de los intelectuales orgánicos,  
rias como el gran valor, para ello se recupera elementos pero que eso si, se construye todo un discurso sobre la  
como la cruz del sur, la wiphala, el cóndor, el Tahuantin- benevolencia de dicha acepción.  
suyo, los criterios de valor como el “ama sua, ama llulla,  
ama khella”, es decir la mediación cultural se convierte 3. Las clases ociosas y los intelectuales orgánicos  
en la clave central que sustenta la presencia de reflexio-  
nes en torno a los orígenes.  
En dicho contexto, se pueden analizar la presencia  
de nuevos rostros migrantes en torno a las grandes  
ciudades, el crecimiento de una especie de anillos de  
pobreza y marginación, espacio ideal para la llegada  
2.  
Entre las raíces y las razas  
Desde dicho origen, se plantean una serie de estu- de las ONG, las fundaciones entidades que tienen a su  
dios de los mas variados que sustenten la importancia cargo la presencia de un desarrollismo, pero también  
del origen y fundamento de los distintos procesos de el criterio de trabajo en la construcción de imaginarios  
construcción de un nuevo rostro para ello comienzan que permitan ver a los pueblos indígenas u. originarios  
a aparecer criterios de pertenencia e identificación, como la voz de la pureza, por ello veremos el crecimien-  
paralelamente se construyen propuestas socio-políti- to de dichas entidades, las cuales atraen capitales para  
cas-económicas que permitan visualizar a los pueblos incidir en modelos desarrollistas o de contraposición a  
olvidados y marginados, nótese que se salta del crite- los criterios de sociedad que se tienen, desde la pers-  
rio de liberación al criterio de marginación, para ello se pectiva de las Ciencias de la Religión y desde la Teología  
construyen bases epistémicas interesantes, pero tam- y economía se trabaja la presencia de los Robín Hood,  
bién se tiene una base en propuestas desde la fortifica- quienes ayudan de manera oculta a los pobres y mar-  
ción socio-política de los distintos modelos de socialis- ginados.  
mos, por eso se intensifica el trabajo de concientización  
Paralelamente también se trabaja en dicha pro-  
desde el manejo de la dialéctica como elemento central puesta de Robinson Crusoe, para dese allá mostrar la  
de procesos de concientización, teniendo como base a mano invisible no solo del mercado, sino de los distintos  
la educación popular como elemento de acercamiento a aparatos ideológicos, por lo cual se hace necesario el  
la realidad, Paulo Freire es uno de los grandes artífices paso hacia “una sociedad donde quepan todos”, el cual  
de dicho lenguaje a partir de procesos de alfabetiza- se mueve en el campo epistémico, pero que muestra  
ción socio cultural, para ello se debe rescatar el aporte la importancia de plantear la tensión entre “sociedad  
4
de las llamadas iglesias históricas , las cuales desde la de mercado y “sociedad con mercado tema que aun  
Metodología del Ver, Juzgar y Actuar, contraponen la sigue en cuestionamiento aun cuando es obviado por  
visión tradicional de acercamiento a lo sagrado, para muchos ideólogos o protagonistas de las discusiones  
dicho ejercicio se trabaja el texto del Éxodo de la Biblia, macro-meso y micro políticas.  
El Evangelio de Marcos, en base a los cuales se ve la  
Sera en este tiempo que emergen muchos rostros,  
importancia radical de nuestros pueblos y sus procesos personalmente considero que tiene que ver con la pre-  
sencia del posmodernismo en las distintas construccio-  
4
Personalmente diferencio entre religión, confesionalidad y  
expresiones de fe.  
nes y deconstrucciones con las cuales aparece el “yo”  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
19  
como lo mas importante, para ello la construcción y escatológicas y una especie de melancolía de una nueva  
emergencia. Hace que el efecto reivindicativo de dichas parusía que se expresaría en la llegada de una parusía  
emergencias permitan la posibilidad de discursos mu- presentida.  
chas veces como una especie de maquillaje de la clase  
A continuación, una larga cita, con el fin de ayudar a  
ociosa (Veblen, 2000), texto que considero muy impor- una reflexión crítica:  
tante para que tengamos un pequeño baño de humildad.  
En dicho paralelismo, se puede encontrar la con-  
fusión entre el folk, History an history, elemento que  
pasa tangencialmente a las discusiones de los pue-  
blos, pues si. Bien los criterios de identidad e iden-  
tificación pareciesen de mucha importancia, lastimo-  
samente los intelectuales orgánicos o constructores  
de las nuevas sociedades o, no se si se puede llamar,  
comunidades, no pasamos de la idealización de pose-  
siones y construcciones solitarias en compañía de los  
El origen del concepto es incierto, a tal punto que  
la antropóloga británica A. Spedding afirma que  
“el suma qamañan o existe en la realidad etno-  
gráfica ni popular; no existe fuera de la cabeza de  
algunos intelectuales ilusos; […] es una espe-  
cia de fantasía de puros valores de uso, donde  
el valor de cambio está ausente” (Spedding,  
2013). De acuerdo a sus afirmaciones y otras  
voces críticas −dice Andrés Uzeda (2009)− se  
trataría de una manifestación o discurso cultu-  
ralista de las elites intelectual aymaras, forma-  
das en una tradición académica antropológica,  
etnológica o etnohistórica. Sin embargo, en  
1983, Philippe Descola escribió una monografía  
etnográfica, resultado de cinco años de investi-  
gación de campo (1976-1980) entre los Achuar  
de la amazonia ecuatoriana; fue publicada en  
francés en 1986 bajo el título de La selva cul-  
ta: Simbolismo y praxis en la ecología de los  
Achuar, donde dice:  
“viernes” para continuar con la “rebelión en la granja”  
la cual si bien es enunciada, como un mero derecho,  
se mantiene como la posibilidad de un “deseo, mer-  
cado y. religión”.  
Sera en ese sentido, desde perspectivas economicis-  
tas que emerge no solo hacía fuera de las comunidades  
originarias el rostro de lo “folk” como lo más visible,  
para eso se llevan criterio de identidad y también de  
personas a las cuales se las idealiza, además que los  
criterios de formación política mantienen la propuesta  
de la formación sindical, de ahí la clave de entender la  
necesidad de la construcción de conflictos, las que a su  
vez hacen que. “todo lo sólido quede en el aire”.  
No es la intención hacer una apología a favor en con-  
tra de tal propuesta, sino el ayudar a que todos aporte-  
mos en los procesos de deconstrucción desde una mi-  
rada que permita entender la tensión cotidiana alienada  
con perspectivas de destrucción de lo diferente.  
La eficacia de un sistema económico no es tanto  
función de la cantidad de riquezas que engendra  
como de su capacidad de satisfacer los objeti-  
vos que se le asignan. En las sociedades donde la  
producción está orientada principalmente hacia  
los valores de uso, estos objetivos son cultural-  
mente limitados y sin alternativa. Así, para los  
Achuar, la finalidad principal de un buen uso de la  
naturaleza no es la acumulación infinita de obje-  
tos de consumo sino la obtención de un estado de  
equilibrio que ellos definen como el “bien vivir”  
(shiir waras) (Descola, 1988: 415).  
4.  
La base de “vivir bien o saber vivir”.  
Considero que hay varias posturas, personalmente  
por lo anteriormente enunciado, pero el ingreso de la  
posmodernidad y la emergencia del ser “reconocidos”  
que no esta mal, considero que da un matiz epecial a la  
idea del vivir bien:  
Posteriormente, a principios del siglo XXI, intelec-  
tuales quechuas y aymaras difundieron los con-  
ceptos Sumak kawsay/Suma qamaña como una  
forma de organización económica, social y cul-  
tural alternativa al desarrollo y a sus formas de  
vida. Finalmente, pasó al ámbito de los debates  
de las asambleas constituyentes de Bolivia (2006-  
2009) y Ecuador (2007-2008), y posteriormente  
se plasmaron en sus constituciones respectivas.  
(Hidalgo-Capitán, 2012). In: https://www.re-  
dalyc.org/journal/281/28150017005/html/  
En este sentido, Vivir Bien es vivir en comunidad,  
en hermandad y en complementariedad. Es una  
vida comunal, armónica y autosuficiente. Vivir  
Bien significa complementarnos y compartir sin  
competir, vivir en armonía entre las personas y  
con todos los seres que habitan en el mundo. Es  
la base para la defensa de la Pachamama, de la  
vida misma y de la humanidad.  
Asumamos que tras de dicha afirmación encontra-  
mos elementos que tienen que ver con las propuestas  
Sin el afán de caer en un fanatismo negacionista, ni  
2
0
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
en un idealismo de los pueblos originarios, considero muchas veces en nombre de ellos nos eternizamos en  
que en tono al vivir bien, hay mucha tela por cortar, posturas poco meditadas o reflexionadas.  
mucho mas si vemos que existen grandes perceep-  
En un acercamiento, de intento amplio y complejo,  
ciones que lastimosmaente dejan mucho que decir en encontré el siguiente esquema que probablemente se-  
cuanto a lo ético político y la coherencia que implica ría la base del vivir bien:  
eel compromiso con nuestro pueblos originarios, pues  
Jugando con las palabras, podría decirse que pro-  
ducto del posmodernismo y las propuestas centradas (https://erbol.com.bo/opinion/retornar-la-vida-co-  
en un discurso endo céntrico quedan muchos elementos munitaria-para-vivir-bien).  
a ser analizados, pues si bien se hablan de criterios  
Creo que hay mucho por reflexionar, la base del vivir  
de aparentemente abiertos, la actitud dialógica y de bien, que personalmente asumo que es para todas las  
convivencia desde el caosmos cotidiano deja mucho culturas, pues considero que no hay una que quiera vivir  
que desear, pues como se dice, como sustento del buen mal, es un bonito desafío, que en el salto del discurso de  
vivir: “La Madre Tierra puede vivir sin el ser humano, los intelectuales orgánicos y. su llegada a las instancias  
pero el ser humano no puede vivir sin la Madre Tierra”. de poder, se fueron rompiendo una serie de criterios.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
21  
ético-políticos, entendibles desde la perspectiva de que cual lastimosamente muestra que las distintas postu-  
no es lo mismo vivir en una comunidad que en un ayllu, ras y propuestas van denotando alternativas desde un  
o una gran urbe. El problema es cuando en base a di-  
chas lecturas se crea espacios de negación de nuestras  
asumir que todo lo que es sólido se deshace en el aire.  
El “sumaj camaña”, tiene su gran valor, pero tam-  
culturas, las cuales se confunde con una mera repeti- bién corre el peligro de ser manipulado por los intelec-  
ción de momentos de ruptura y construcción muchas tuales orgánicos, quienes desde una falsa apropiación  
veces violenta de posturas nada serias, sino alienadas de la sociedad del contentamiento, viven una cotidiani-  
y manipuladas.  
dad macro, meso y micro política economicista de una  
Hoy se habla mucho del vivir bien, pero poco se dis- sociedad del consumo inmediato y del silencio muchas  
cute de las implicaciones que tiene en sociedades am- veces cómplice, sustentado en propuesta reivindicati-  
plias y complejas, es decir en espacios que no coinciden vas, pero poco abiertas a la corresponsabilidad.  
con el ritmo de las llamadas sociedades modernas a  
cuyo interior por ejemplo el manejo de la mercancía y  
Agradecimientos  
Primero al Prof. Carlos Maldonado por el desafío  
capital tiene un ritmo completamente diferente, ade- lanzado, a la gente del pueblo yungueño, pues sin sus  
más de la forma de llevar adelante las implicaciones de enseñanzas no hubiese conocido mi cultura de manera  
una sociedad de intercambio muy diferente a la que se crítica, comprometida y en el intento de coherencia.  
construye desde criterios comunitarios y agrarios.  
A los colegas del CIET y todos los que provocan que  
Se considera que los postulados responden a una la idolatría de las alienaciones cotidianas sean cuestio-  
serie de intereses e intencionalidades, pero que ellas nadas desde un “Caminante no hay camino, se hace  
deben ser pensadas y analizadas, pues la dinamicidad camino al andar.  
del mundo implica que la relación entre la cosmovisión  
agraria y la presencia de los nuevos derroteros implican Declaración de Conflicto de Intereses  
un planteamiento hologramático de las propuestas del  
El autor declara la no existencia de posibles conflic-  
buen vivir, las cuales no se queden en una visión uni- tos de interés por lo que respeta a la investigación, la  
dimensional la cual lastimosamente va creando cuellos autoría y/o la publicación de este artículo.  
de botella y linealidades que generan espectros de no  
dialogüicidad.  
Financiación  
El autor no recibieron ningún soporte financiero para  
la investigación, la autoría y/o la publicación de este  
artículo.  
5.  
El Pachacutí  
Ya cerrando el camino, permitan hacer algunas pun-  
tualizaciones en torno al pachacuti, palabra que muchos Bibliografia  
confunden con el gran retorno o la presencia de neo  
universales que lastimosamente limitan los espacios de Duque, J. (1996). Por una sociedad donde quepan to-  
coherencias con nuestros pueblos.  
E buen vivir, no es un privilegio, es un criterio de  
auto-hetero y corresponsabilidad.  
dos: Cuarta Jornada Teológica de CETELA Teología  
de Abya-Yala en los Albores del Siglo XXI (Vol. 4).  
Departamento Ecuménico de Investigaciones.  
No implica la marginación, no se puede caer en Eliade, M. (1992). O sagrado e o profano. In Livraria  
lo que se critica a las otras formas de vivir, como por  
ejemplo de Welfare state.  
Martins Fontes Editora Ltda. (LIVROS DO, Issue 2).  
https://doi.org/10.14393/rfadir-v48n2a2020-50650  
El Buen vivir implica ante todo un respeto profundo Kessel van, J. (1983). Ayllu y ritual terapéutico en la  
del otro, la comunidad (Ayllu) y los valores.  
medicina andina. Chungara, 165-176.  
Se debe asumir la presecnia de lo otro diferente eso Lévi-Strauss, C. (1988). Tristes Trópicos - Espanhol.  
implica el saber que hay otras formas de vivir y convivir, Orwell, G. (2020). Rebelión en la granja (edición esco-  
siendo el andino uno mas no el único  
Implica respeto y ante todo vivencia del auto-eco y  
co compromiso con. La vida y lo cotidiano.  
lar)(edición definitiva avalada por The Orwell Esta-  
te). Debols! llo.  
Ramirez, I., Maldonado, C., & Villacorta Guzmán, J. R.  
(2016). Reflexiones y acciones universitarias en el  
Conclusiones  
arte de educar.  
Sung, J. M. (1999). Deseo, mercado y religión (Vol. 21).  
Llegar a conclusiones no es mi estilo de escribir,  
Editorial Sal Terrae.  
considero importante el recuperar la pedagogía de la Van den Berg, H. (1989). La tierra no da así no más. Los  
pregunta en medio de una sociedad del cansancio, la ritos agrícolas en la religión de los aymara- cristia-  
2
2
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
nos. In CEDLA. https://doi.org/10.1063/1.3033202  
Varios, Elementos para el debate e interpretación del  
Buen vivir/Sumak kawsay, Contribuciones desde  
Villacorta Guzmán, J. R. (2009). La Evolución de la Crí-  
tica al Mercado en Hugo Assmmann (Verbo Divino  
(ed.); Misionolog). osa.  
Coatepec, núm. 31, 2016, Universidad Autónoma Villacorta Guzmán, J. R. (2007). Placerocidad en la  
del Estado de México, in: https://www.redalyc.org/  
journal/281/28150017005/html/  
Educación: Buscando el Lapiz con corporeidad y Be-  
lleza (O. BOLIVIA (ed.); 1 ). JRVG.  
a
Veblen, T. (2000). Teoría de la clase ociosa.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
23  
CC, Vol.2. N° 2: 25-36. https//doi.org/ 10.48168/cc022021-003  
Buenas prácticas en transición  
energética en América Latina.  
El planteamiento sistémico de  
un problema complejo  
Good Practices in Energy  
Transition in Latin America. The  
Systemic Approach to a Complex  
Problem  
Emilio Nudelman Cruz  
Programa Nacional Estratégico en Energía y Cambio Climático,  
Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología de México, México  
Recepción: 22/10/2021  
Aceptación: 30/11/2021  
Resumen  
La crisis ambiental es el mayor síntoma de la crisis civilizatoria de la modernidad capitalista. Como parte de  
dicha crisis ambiental, la cuestión energética juega un papel fundamental, pues esta atraviesa todas las activi-  
dades humanas. Resulta necesario comprender la transición energética como problema complejo, dado que son  
múltiples las variables que intervienen en este proceso, el cual no se reduce a la sustitución de combustibles ni a la  
aplicación de ecotecnologías, sino que se sustenta en aspectos relacionales entre individuos y colectivos, y de es-  
tos con los ecosistemas con los cuales coexisten. En tal sentido, es fundamental identificar las buenas prácticas en  
transición energética para aprender de ellas, y encontrar en lo cotidiano las acciones en pos del cuidado de la vida.  
Palabras clave: Transición energética; Crisis ambiental; Pensamiento complejo.  
Abstract  
multiple variables that intervene in this process, which  
is not reduced to the substitution of fuels and the ap-  
plication of eco-technologies but is based on relational  
aspects between individuals and groups, and of these  
The environmental crisis is the greatest symptom of  
the civilizational crisis of capitalist modernity. As part  
of this environmental crisis, the energy issue plays a with the ecosystems with which they coexist. It is es-  
fundamental role, since energy cuts through all hu-  
man activities. It is necessary to understand the en-  
ergy transition as a complex problem, since there are  
sential to identify good practices in energy transition to  
learn from them and find daily actions in pursuit of the  
care of life.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
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Keywords: Energy Transition; Environmental Crisis; 2. Crisis civilizatoria, crisis ambiental y crisis  
Complex Thinking. energética  
1.  
Introducción  
El proyecto civilizatorio de la modernidad capitalista,  
hoy expresado en su forma neoliberal, está en crisis.  
En la actualidad, 81% de la energía en el planeta se Esta se comprende como una serie de consecuencias  
produce con combustibles fósiles (International Energy derivadas de un particular sistema de ordenamiento y  
Agency, 2020), para satisfacer necesidades relaciona- reproducción del mundo y de la vida, sustentado en el  
das con el transporte, la industria, la vivienda y la ali- dominio y sometimiento del otro: aumento de la pobre-  
mentación, principalmente. Ello ocurre en el contexto za extrema; hambre; profundización de la desigualdad  
de una crisis civilizatoria en el que 30 millones de lati- social; procesos neocoloniales aculturativos; subyu-  
noamericanos no pueden acceder siquiera a la energía gación de saberes e identidades; despojo sistemático  
eléctrica, de acuerdo con la Organización Latinoame- del patrimonio biocultural y erradicación de prácticas  
ricana de Energía (Combe, 2020), lo cual los ubica en agroecológicas tradicionales por la agricultura industrial  
una situación de pobreza energética, y, por tanto, de y los monocultivos; indefiniciones ideológicas; progre-  
violencia estructural.  
sismos políticos, económicos y culturales parciales; uso  
El fin de la era del petróleo es próximo, ya que se irracional y agotamiento de los componentes naturales;  
trata de un componente natural finito. Así, desde distin- contaminación del agua, la tierra y el aire; particula-  
tos intereses e ideologías se plantea la urgencia de una rismos culturales exacerbados; relativismos extremos;  
transición energética para sustituir los hidrocarburos atomización y enfrentamiento social; individualismos  
por otras fuentes de energía, en teoría menos contami- exagerados; angustia, desesperanza, incertidumbre;  
nantes y más democráticas. Sin embargo, la sustitución consumismo; extinción acelerada de especies vegetales  
de combustibles y tecnologías, aunque muy necesaria, y animales; devastación de servicios ecosistémicos y  
no garantiza por sí sola que sea justa y sustentable. aceleración del cambio climático (Nudelman, 2019).  
Ejemplo de ello: la transferencia vertical de conoci-  
Es la crisis ambiental el mayor síntoma con el cual  
mientos y tecnologías, o los parques solares y eólicos se expresa la crisis civilizatoria (Leff, 2020a); y, como  
erigidos a partir del despojo territorial, profundas afec- parte de dicha crisis ambiental, la crisis energética jue-  
taciones ecosistémicas (derivadas, por ejemplo, del ex- ga un papel principal. Luca Ferrari (2021) afirma que la  
tractivismo minero), y la explotación laboral de miles de producción de petróleo ha alcanzado su punto máximo,  
comunidades alrededor del mundo.  
al menos el de buena calidad y fácil extracción, y ha  
En tal sentido, la transición energética puede ser comenzado a disminuir, lo cual implica que cada vez  
entendida como parte de un proceso complejo: una será más caro extraerlo, se requerirá de mayor energía  
transición civilizatoria hacia sistemas socioecológicos para lograrlo y será de menor calidad, en un contexto  
integrales que permitan la reproducción ética de la vida en el que el consumo, orientado por los deseos de un  
(Nudelman, 2019). Como dice Sandra Rátiva (en Com- estilo particular de vida inspirado en los patrones cul-  
be, 2020), la energía es una excusa y un camino para turales capitalistas, aumenta. Tal situación, sin duda,  
esa transformación, y debe articularse con otros pro- exige un cambio profundo en la forma en que vivimos;  
cesos y fenómenos económicos, culturales, políticos y en específico, de aquel 1% que concentra 50% de la  
sociales para poder construir formas de vida digna. De riqueza mundial (Nudelman, 2019), y que contamina  
acuerdo con Marie Combe (2020), en América Latina mucho más que el resto de la población. Se trata de un  
existen más de 700 experiencias de transición energé- problema complejo, eminentemente sociocultural, que  
tica justa y sustentable, entre las que se encuentran no puede solucionarse de manera disciplinar:  
buenas prácticas de generación comunitaria de ener-  
gías renovables, de organización popular democrática,  
de participación social, autonomía y liberación comuni-  
taria. En este artículo se prestará atención a las prác-  
ticas identificadas en el caso cubano, por lo general no  
considerado como ejemplo de transición energética, y  
que resulta en un caso paradigmático de lo que está por  
venir: el fin de la era del petróleo. Asimismo, se men-  
cionan tres casos más ubicados en México y Guatemala,  
recuperados por Marie Combe en su documental “La  
energía de los pueblos” (2020).  
Combatir esta situación, luchar por disminuir o  
erradicar esta desigualdad, requiere de un enfo-  
que integral. No se trata, como plantean algunos,  
de reducir aisladamente los índices de fertilidad y  
las tasas de natalidad para detener o controlar el  
crecimiento demográfico. No se trata solamente  
tampoco, por ejemplo, de ejecutar políticas efec-  
tivas de conservación de recursos y protección  
del medio ambiente. Las soluciones no son sólo  
ni principalmente físicas, sino sociales. Se  
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CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
trata de influir sobre la calidad de vida, no sólo  
El poscrecimiento apuesta por reducir la productivi-  
combatiendo las graves carencias en cada esfe- dad ahí donde sea necesario y posible; pero no redu-  
ra, sino actuando sobre el conjunto en función cirla en lo general, sino reorientarla en términos de una  
del desarrollo de nuestras sociedades, que no es vida ética, y de la suficiencia y la finitud de los compo-  
necesariamente sinónimo de crecimiento econó- nentes de la naturaleza. Desde el poscrecimiento, el de-  
mico. (Castro, 1983, p. 209)  
sarrollo no es entendido como crecimiento económico,  
y se afirma que el bien-estar puede ser alcanzado más  
El progreso y el crecimiento económico basado en allá del crecimiento económico, pero no sin él. Desde  
combustibles fósiles han permitido que los países ricos esta propuesta se busca la desmercantilización de la  
sean ricos, acompañado ello además de una división vida, la descentralización de las decisiones respecto al  
internacional del trabajo en el que los países pobres o desarrollo y la desmaterialización de la producción (Un-  
periféricos cumplen la función de asegurar las ma- ceta, 2015).  
terias primas, los commodities, mano de obra barata  
En cuanto a las diferencias entre decrecimiento y  
y poco cualificada, y escasa regulación ambiental para poscrecimiento, mientras que el primero parece una  
garantizar las formas de vida de los países centrales, propuesta centrada en una reducción a corto plazo del  
que hoy demandan que los pueblos pobres no crezcan consumo y la producción en los países ricos del norte, el  
ni se desarrollen haciendo uso de los componentes na- poscrecimiento intenta elaborar una idea con una apli-  
turales de los cuales disponen. El acceso a energía ba- cación más amplia, con ideas más generales y líneas  
rata, pues, ha permitido la industrialización de dichos de actuación que puedan ser adaptadas posteriormente  
países centrales y sus actuales formas de vida. Ante por los distintos Estados en función de sus necesidades  
este panorama, frente al crecimiento económico y el reales de producción y consumo, dejando de lado si eso  
papel del desarrollo y el progreso basados en combus- significa crecer o decrecer. (Bermejo, 2017, p. 41)  
tibles fósiles, se identifican las propuestas del decreci-  
miento y el poscrecimiento (Bermejo, 2017).  
Por estas razones, y teniendo presentes los contex-  
tos históricos y contemporáneos de América Latina y  
el Caribe, y si bien ambas propuestas no se excluyen  
El decrecimiento proviene de países centro, con al-  
tos grados de desarrollo obtenidos en el curso de la mutuamente, se identifica al poscrecimiento como una  
historia a partir de procesos coloniales de extracción propuesta con adecuación histórica, política y cultural  
de componentes naturales mediante la explotación de para hacer frente a la crisis ambiental desde una tran-  
la mano de obra extranjera, en la periferia. En un con- sición energética justa, mientras que el decrecimiento  
texto regional de alta producción industrial y alto con- propio de otros contextos y necesidades puede re-  
sumo, el decrecimiento propone reducir en lo general la sultar funcional para la rearticulación del proyecto civi-  
producción y el consumo: dejar de crecer. Pero no todos  
los pueblos del mundo están en las mismas condicio-  
lizatorio en crisis bajo el discurso de la sustentabilidad.  
El mayor reto para la transición energética en el  
nes que Europa o los Estados Unidos. Esta propuesta marco de la crisis ambiental, y como parte constitutiva  
pareciera válida para las economías más desarrolladas, de una necesaria transición civilizatoria, no descansa  
en países como Alemania o Dinamarca. Sin embargo, sobre las bases de la sustitución técnica y tecnológica,  
no todos los pueblos pueden decrecer; en todo caso, sino sobre la urgencia de establecer una ética colectiva  
el decrecimiento de las grandes economías “permitiría  
liberar los recursos necesarios para que las economías lítico y económico, con sustento en el diálogo entre esas  
en desarrollo pudiesen cubrir sus propias necesidades”  
distintas racionalidades e identidades; ello, al implicar  
Bermejo, 2017, p. 38). Sin embargo, eso no significa un proceso de cambio ético-cultural, involucra un pro-  
que se deban imitar los mismos patrones de desarrollo ceso pedagógico popular y emancipatorio. De acuerdo  
orientada a construir un nuevo orden sociocultural, po-  
(
de los centros de poder:  
con Irene Machuca (2017), la transición energética, le-  
jos de ser un problema científico o tecnológico, trata de  
un problema filosófico, político y económico referente a  
la autogestión colectiva de las necesidades y los medios  
D’alisa et al. (2015) están de acuerdo con esto y  
van más allá, considerando de vital importancia  
que las economías no desarrolladas no aprove- para su satisfacción.  
chen el decrecimiento occidental para seguir los  
pasos del mismo sino que lo utilicen para “libe- 3. La transición energética como problema com-  
rar un espacio conceptual” y que éstas puedan plejo  
establecer sus propios objetivos y metas hacia  
lo que consideren una “vida buena”. (Bermejo,  
017, p. 38)  
La cuestión energética supera los paradigmas  
técnico-científicos propios del logocentrismo moderno,  
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Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
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pues el modelo energético, el tipo de energía que se tecnologías: es fundamental abarcar el conjunto de re-  
produce, quién la produce, para qué, quién la consu- laciones y procesos que se desprenden de la cuestión  
me y con qué fin, responde a cuestiones relacionales energética. Entendida como medio y no como fin, la  
entre el ser humano y los ecosistemas con los cuales energía interviene en todos los procesos reproductivos  
coexiste, y está condicionado por un aspecto central: la del ser humano: organización sociopolítica y económi-  
cultura. Los recursos energéticos de los cuales dispone ca, alimentación, movilidad, vivienda, industria, comu-  
una sociedad se relacionan de manera intrínseca con nicación, salud, vestido, recreación. Si se plantea la  
sus cosmovisiones, costumbres, imaginarios, creencias, cuestión energética como problema complejo, se vuel-  
valores, “procesos territoriales, prácticas organizati- ve claro que no puede haber un cambio de paradigma  
vas, usos, significados” (Blanco-Wells, 2019, p. 161). energético, un cambio de modelo, si no hay un cam-  
De ahí que, como dice Mercedes Pardo, los problemas bio cultural; si no hay una transformación civilizatoria  
de la energía deban plantearse y resolverse “en térmi- orientada por una ética de la vida: un cambio en el  
nos de las interacciones de los factores tecnológicos, modelo económico, político y social:  
medioambientales, económicos y sociopolíticos” (2006,  
p. 16), ya que las partes que componen el todo se rela-  
cionan entre sí de manera interdependiente.  
Traducido a la acción, significa desarrollar me-  
didas concretas en diferentes ejes como la ali-  
mentación, la movilidad, los hogares, el ocio,  
o los bienes, prestando especial atención a las  
tierras cultivables, los tipos de cultivo, la distri-  
bución de bienes, la electricidad, la movilidad  
laboral, el trabajo, o las materias primas. [...]  
En el contexto actual, donde las cuestiones so-  
ciales y económicas no pueden desvincularse  
de las cuestiones energéticas en los ámbitos  
cercanos a la vida de las personas, es impres-  
cindible incluir en el diálogo social y político  
la lucha por la soberanía energética como al-  
ternativa al sistema energético globalizado, y  
reivindicar la soberanía de los pueblos para la  
transformación de los sectores energéticos en  
espacios sostenibles a través de la democracia  
real. (Machuca, 2017, p. 124)  
Son muchos factores y variables los que atraviesan  
la cuestión energética, por lo que los métodos de aná-  
lisis de sistemas complejos permiten una compresión  
integral del mismo (Acevedo et al., 2020). En tanto se  
trata de un proceso en el cual intervienen distintas dis-  
ciplinas para su comprensión e intervención, ya que el  
proceso mismo se compone a partir de la relación entre  
las partes que lo integran (variables sociales, históricas,  
culturales, políticas, económicas, geográficas, ambien-  
tales, físicas, químicas, tecnológicas), que se retroali-  
mentan entre sí, se afectan y condicionan unas a otras,  
la aproximación debe darse desde la transdisciplina, e  
idealmente desde la interdisciplina; ello debido a que se  
dispone, principalmente, como un sistema sociotécnico  
que no puede ser comprendido aislando el objeto de  
estudio del resto de procesos y fenómenos que lo afec-  
tan, y que finalmente inciden sobre la forma en que se  
expresa:  
Por su naturaleza, la cuestión energética es indiso-  
ciable de los problemas vinculados a la producción y  
Los efectos son resultado y, a la vez, producto- consumo de alimentos, a la gestión del agua, al sistema  
res de otros efectos, incluyendo aquellos que los de salud, a la economía política, a la lingüística, a la an-  
produjeron. Los sujetos que interactúan en el tropología, a la sociología, a la geografía, a la historia, a  
proceso en estudio se encuentran influenciados la filosofía y a la psicología; por tanto, transitar hacia un  
entre sí, las decisiones económicas, políticas e modelo energético distinto debe plantearse de manera  
institucionales, resultan en efectos sobre las di- sistémica, teniendo presente las relaciones que se tejen  
mensiones ecológica y social, que a su vez pro- en torno a la cuestión.  
ducen efectos sobre las mismas dimensiones que  
Actualmente hay un fuerte dominio técnico-mate-  
incidieron sobre estos. Las decisiones políticas y mático por parte de las ingenierías y las ciencias físi-  
económicas pueden generar cambios en los pa- cas y biológicas. Mercedes Pardo (2006) asegura que el  
trones de consumo energético, que resultarán en asunto de la energía es, antes que nada, un hecho so-  
efectos que inciden sobre las futuras decisiones cial, por lo cual se debe profundizar sobre la compren-  
en estas dimensiones y sus resultados. (Acevedo sión del mismo desde las ciencias sociales. Se cuenta  
et al., 2020, p. 80)  
con herramientas para la comprensión de este hecho,  
como son la sociología ambiental, la ecología política, la  
No es posible comprender la complejidad de la cues- sociología de la energía, como formas de comprender  
tión energética si solamente nos enfocamos en uno de la relación compleja energía-sociedad-medio ambiente.  
sus aspectos, como la sustitución de combustibles y  
El planteamiento y tratamiento de la transición ener-  
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CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
gética como problema complejo, y por tanto la transi- aspecto central. Para ello se sugiere buscar ejemplos  
ción a la sustentabilidad de la vida, no es posible sin histórica y socioculturalmente apropiados.  
los aportes de las ciencias sociales. Es necesario “no  
jerarquizar los saberes, darle su lugar a las ciencias so- 4. Un caso emblemático: Cuba  
ciales, no subsumirlas dentro de una superioridad de las  
ciencias físico-matemáticas, incluso biológicas” (Leff,  
Tras la caída de la Unión Soviética, y con ello la pér-  
2
020b). La comprensión de la cuestión ambiental, de la dida de la mayor cooperación internacional en Cuba,  
cual forma parte la cuestión energética:  
comenzó en la isla lo que se conoció como “Periodo es-  
pecial”: una caída en picada de la economía nacional  
[...] no puede ser esquivada diciendo que ese que representó el decrecimiento del producto bruto in-  
es problema de los científicos del clima, o de los terno (PBI) en 34%, y la pérdida del 80% de sus mer-  
ecólogos, o de los economistas. Hoy en día es la cados de exportación e importación, en el que resaltó la  
ciencia social la que debería tener la capacidad disminución de las importaciones de petróleo en más de  
de responder. Porque incluso la economía ecoló- 60% (Morgan, 2006). Debido a esta situación tuvieron  
gica tiene sus límites para transformar a fondo que parar las fábricas, la industria y el transporte, en un  
los modos de producción y hacerlos más acor- contexto de constantes apagones eléctricos y escasez  
des con la sustentabilidad de la biosfera. Somos general de productos necesarios para la reproducción  
los sociólogos, psicólogos sociales, antropólogos, social.  
los filósofos, quienes entramos a desentrañar la  
En la década de 1980, Cuba contaba con 90 000  
cuestión ambiental, cómo se ha anidado en los tractores soviéticos, fábricas de pesticidas y fertilizan-  
seres humanos una voluntad de poder y de do- tes químicos, y todo se detuvo de manera abrupta en  
minio que son los que rigen los imaginarios, las 1990, de una semana a la otra. La reducción del 80%  
racionalidades, y que han generado todo el apa- en las importaciones de comida se reflejó en una pro-  
rataje científico, tecnológico, económico, es decir, funda escasez que se volvió evidente en la malnutrición  
los dispositivos de poder con los cuales el ser hu- de menores de cinco años, mujeres embarazadas con  
mano interviene en la naturaleza. (Leff, 2020b, anemia y recién nacidos con bajo peso. Para 1994, el  
s. p.)  
cubano promedio había perdido 9,4 kg de peso (Mor-  
gan, 2006). Sin petróleo para producir energía eléctri-  
Más allá de la ciencia y la tecnología, es oportuno ca los refrigeradores se apagaron, y la conservación de  
revalorizar los imaginarios y prácticas de los actores la poca comida disponible se complicó. Lo mismo su-  
sociales orientados por el cuidado de la vida en territo- cedió con los aires acondicionados y los ventiladores,  
rios concretos, aprender de ellos de manera colectiva, los elevadores, las bombas distribuidoras de agua, el  
“porque es a través de esos modos otros de compren- transporte, las fábricas y las industrias, pues si no había  
sión, de esos imaginarios, que se está interviniendo la energía eléctrica no podían funcionar, y muchas veces  
dinámica propia de la vida; los equilibrios ecológicos del aunque funcionaran no había (ni hay) materias primas  
planeta” (Leff, 2020b, s. p.), y ese es el campo de la o piezas de repuesto para dar el mantenimiento nece-  
sociología y la antropología, transdisciplinarias por su sario a los medios de producción.  
propia naturaleza.  
Aunada a la situación derivada de la caída de la Unión  
Con el fin de abordar la transición energética desde Soviética, los Estados Unidos fortalecieron el bloqueo  
la complejidad, las ciencias sociales permiten compren- económico y comercial hacia la isla. Así, redujeron aún  
der las causas históricas de la crisis ambiental; las ma- más las posibilidades de que adquieran bienes de otras  
neras en que las sociedades se reapropian de la natura- partes del mundo, necesarios para la reproducción de  
leza y construyen sus mundos de vida en la actualidad; la vida humana, al prohibir el comercio con Cuba; al  
los conflictos entre distintos tipos de racionalidades, de cerrar el acceso a fuentes financieras, como el Banco  
imaginarios, de sentidos de vida, de intereses; las rela- Mundial o el Fondo Monetario Internacional; al impedir  
ciones entre individuos y colectivos, y de estos con su que empresas extranjeras presentes en la isla puedan  
entorno. Estas ciencias acompañan los movimientos so- participar de la economía estadounidense. El dinero cu-  
cioambientales y dan consistencia a los conceptos que bano perdió su valor frente al dólar hasta 150 veces  
explican los hechos sociales, para que estos adquieran (Morgan, 2006), y dejó de servir como valor de cambio  
sentido, y se pueda diseñar democráticamente, con la para adquirir bienes y servicios.  
participación de todos los actores involucrados, una es-  
trategia para la recuperación y el despliegue de la vida de alguna forma, y se ha mantenido a flote mediante un  
Leff, 2020a), en la que la transición energética es un sistema complejo de soluciones prácticas que son poco  
Cuba vivió un pico artificial del petróleo, por decirlo  
(
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
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reconocidas en el campo de la transición energética, y cesidades energéticas, alimenticias y sociales, los siste-  
que resulta necesario atender en tanto es el modelo de mas de permacultura abrieron la oportunidad a nuevas  
lo que, en teoría, sucederá en el resto del mundo más actividades económicas y a nuevas formas de pensar  
temprano que tarde. Sin duda este pico afectó todos los la economía. Se procesa materia prima para su trans-  
aspectos de la vida de los cubanos, y al no poder ingre- formación y comercialización, se abren las puertas al  
sar nada desde el extranjero debido al bloqueo econó- intercambio de valores de uso y se aprovechan todos  
mico y comercial que se mantiene hasta nuestros días los componentes del sistema, sus residuos y subpro-  
como estrategia para derrocar al gobierno cubano, todo ductos, volviéndolo un sistema cerrado, neguentrópico,  
se tuvo que resolver con lo que había adentro.  
Quizás sea el aspecto alimentario el que vivió mayo-  
que conserva la energía de manera efectiva y eficiente.  
De esta forma, cada barrio produce los alimentos  
res transformaciones, en específico la agricultura. Has- que consume: 50% de las frutas y verduras que se con-  
ta su pico de petróleo, Cuba sostenía su agricultura con sumen en La Habana, por ejemplo, eran producidas por  
fertilizantes basados en gas natural, pesticidas derivados medio de la agroecología urbana, y en otras poblacio-  
del petróleo y diésel para hacer funcionar la maquinaria. nes ese porcentaje subía a 80% y hasta 100% (Mor-  
Con el apoyo de la Unión Soviética llegó a tener la agri- gan, 2006). Ello demuestra que la transición energética  
cultura más industrializada de América Latina, y usaba  
el doble de fertilizantes que los Estados Unidos (Morgan, la necesidad de fertilizantes procedentes de los com-  
006); sin embargo, nunca fue suficiente para alimentar bustibles fósiles, lo que deriva en parcelas más peque-  
va de la mano de la soberanía alimentaria, eliminando  
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al pueblo porque estaba orientada a las grandes planta- ñas, suelos más sanos, y en la necesidad de que más  
ciones para la exportación de cítricos, azúcar de caña, personas se vinculen a los procesos de reproducción  
ron y tabaco, al tiempo que importaba alimentos básicos social. Romper con el paradigma de la gran producción  
como arroz y aceite. El sistema de agricultura, propio de agrícola sustentada en hidrocarburos derivó en la ne-  
la revolución verde, se quedó sin energía.  
cesidad de tener que repartir más tierras, en la recon-  
La gente se vio obligada a organizarse para cultivar  
versión y rehabilitación de las mismas, respetando los  
alimentos donde fuera posible, lo cual fue muy impor- ciclos reproductivos de la propia tierra, lo cual resulta  
tante en las ciudades, recuperando terrenos baldíos, en un proceso en el que la energía es conservada y  
por ejemplo, y sin tener mayores conocimientos de aprovechada al máximo para satisfacer las necesidades  
agricultura. La isla se volcó a adaptar la mayor parte de manera eficiente, porque así se reducen los consu-  
de la tierra cultivable a la agricultura ecológica, a la mos de combustibles fósiles al tiempo que el esfuerzo  
creación de huertos urbanos comunitarios, tanto en te- para producir alimentos es menor.  
rrenos baldíos como en los techos de las casas y de los  
Con la falta de diésel para el funcionamiento de la  
edificios. Recibió el apoyo de expertos en permacultura gran maquinaria agrícola, el suelo dejó de comprimirse  
para perfeccionar esta práctica improvisada, alentada debido al paso de tractores y cosechadoras. Se rein-  
por la necesidad y la voluntad, y se facultaron formado- trodujeron entonces animales de trabajo, lo cual mo-  
res con el fin de extender las buenas prácticas por toda dificó la relación de los trabajadores con los medios de  
la isla a partir del diseño de talleres y cursos, buscando producción y mejoró la relación del ser humano con la  
solucionar con ello el problema energético, alimenta- naturaleza. Los animales produjeron el abono necesa-  
rio y de vivienda (conservación y cocción de alimentos, rio para dar forma al humus o composta en lugar de  
energía eléctrica, confort térmico, abastecimiento de usar fertilizantes químicos; ayudaron en el ahorro de  
agua), a partir de relaciones comunitarias, promovien- combustibles; sus pezuñas removieron y oxigenaron el  
do el autocuidado y el cuidado del otro. Como dice la suelo; se volvieron compañeros de trabajo, dándole un  
permaculturista Patricia Allison (en Morgan, 2006), no lugar distinto al otro no-humano, mejorando las capa-  
se trató de un asunto tecnológico, sino de una cuestión cidades de empatía y colocando al ser humano en una  
relacional entre individuos y colectivos.  
posición distinta en la naturaleza. La reintroducción de  
Las prácticas permaculturales se fueron extendien- animales en sustitución de los tractores también abrió  
do por toda Cuba como pruebas piloto. Los vecinos, al nuevas oportunidades de facultamiento comunitario,  
observar que un sistema de permacultura funcionaba, pues quienes sabían entrenar animales de trabajo fue-  
replicaban la estrategia adecuando la permacultura a ron contratados para capacitar a más gente, con el fin  
sus necesidades y características, sin importar las di- de que, a su vez, se volvieran capacitadores de más  
mensiones del sistema. En la isla se le conoce a esta personas (Morgan, 2006). Se volvió fundamental para  
práctica como permacultura criolla, ya que se trata de la reconstitución de los suelos y la agricultura orgánica  
algo muy propio que parte de los mismos intereses y la rotación de cultivos, así como los cultivos intercala-  
preocupaciones de la gente. Además de satisfacer ne- dos y el uso de abonos naturales mediante la recupera-  
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CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
ción de desperdicios orgánicos. Tierras cultivables más  
Con transporte limitado, el sistema educativo cuba-  
pequeñas y con amplia variedad de especies redujeron no tuvo retos importantes. Las universidades tomaron  
de manera natural la diseminación de plagas, ya que la decisión de descentralizarse para garantizar el acceso  
se aprendió a atraer a la fauna nociva hacia las orillas a la educación a las personas que viven alejadas de los  
de las parcelas y se desarrollaron varios biopesticidas centros de estudio y que no pueden desplazarse, y por  
(Nudelman, 2019). ello se crearon los Centros Municipales Universitarios  
Frente a la crisis energética, se trabajó a nivel co- (Nudelman, 2019). Aun frente a la crisis energética,  
munitario a partir de las necesidades, intereses, prio- Cuba no cer ni una sola escuela u hospital. Al contra-  
ridades y capacidades locales. En tal sentido, se or- rio: hubo más escuelas y hospitales: 57 doctores por  
ganizaron pequeñas cooperativas agrícolas con altos cada mil habitantes en Cuba, frente a los 28 por cada  
grados de autonomía: 40% de las granjas del Estado mil en los Estados Unidos (Morgan, 2006). Para enfren-  
fueron distribuidas entre cooperativistas particulares. tar la falta de combustible, se organizó el sistema de  
Con los Decreto-Ley 259 y 300, se repartieron tierras salud de forma tal que los médicos y enfermeras tra-  
en usufructo con la condición de que se dedicaran a la bajaran en los mismos lugares de los cuales procedían,  
producción de alimentos para satisfacer los mercados fortaleciendo con ello la estructura social comunitaria  
internos. Estas prácticas de transición energética han y la disminución de los desplazamientos. En los peores  
favorecido procesos de desurbanización y recampesi- años del periodo especial, Cuba mantuvo la expectativa  
nización, beneficiando el surgimiento de mercados lo- de vida y el índice de mortalidad en menores de cinco  
cales en pos de la soberanía alimentaria y la economía años casi a la par que los Estados Unidos: 77 años en  
solidaria, ya que muchos de los alimentos producidos Cuba, y 77,4 años en los Estados Unidos, y la mortan-  
en estos espacios son regalados a guarderías, escue- dad infantil, 6,3 (muertes por cada mil habitantes) en  
las, centros de trabajo, y otros productos pueden ser Cuba, y 6,5 en los Estados Unidos. La gran diferencia  
adquiridos a precios por debajo de los estatales. Ello no fue que Cuba logró estos resultados consumiendo 1/8  
es una obligación, sino que son prácticas que surgen de de la energía derrochada por los Estados Unidos (Mor-  
manera libre entre las personas, fortaleciendo con ello gan, 2006).  
las relaciones de reciprocidad necesarias para el pensa-  
Al comienzo del periodo especial, 95% de la po-  
miento y la acción comunitaria (Nudelman, 2019).  
blación contaba con energía eléctrica en sus hogares;  
Aunado al problema de la alimentación está el de la el otro 5% vivía en áreas remotas. Es sabido que la  
movilidad. Sin combustible para el transporte, la gente energía fotovoltaica y eólica es cara para satisfacer las  
esperaba hasta cuatro horas por un camión para llegar necesidades energéticas de todo un país, pero a peque-  
a su centro de trabajo. Desde la voluntad política, la ña escala ha sido útil sobre todo en las áreas remotas,  
gente aprendió a movilizarse de otra forma: el gobierno dándosele prioridad a escuelas y centros de salud. Asi-  
importó 1,2 millones de bicicletas chinas y produjo me- mismo, la población ha aprendido a calentar el agua  
dio millón más, las cuales fueron distribuidas a lo largo con la energía solar para reducir el consumo energético  
de toda la isla. La crisis energética y la necesidad de en la cocción de los alimentos (un ahorro del 50% en el  
transición mejoró la salud de los cubanos, pues tuvie- consumo de combustibles fósiles) y en el calentamiento  
ron que caminar más, usar la bicicleta y comer mejor de agua para bañarse. También se recurrió a la com-  
(
mayor cantidad de verduras y frutas, y menor cantidad bustión de biomasa para la producción de energía eléc-  
de grasas), reduciendo los índices de diabetes y enfer- trica, sobre todo recuperando los desperdicios de los in-  
medades cardiacas (Morgan, 2006).  
genios azucareros; de esta forma, los propios ingenios  
La falta de combustible obligó a Cuba a pensar en se convirtieron en plantas generadoras de electricidad,  
un sistema de transporte masivo, e innovó con los “ca- satisfaciendo al menos 30% de las necesidades energé-  
mellos”: un remolque jalado por un semitractor, el cual ticas de todo el país con la quema del bagazo de caña,  
era capaz de transportar hasta 300 personas a la vez. abonando a la soberanía energética (Morgan, 2006).  
La solidaridad se volvió norma, y fue muy popular el  
pedir botella”. Hoy en día, los vehículos oficiales tienen plicó un cambio en la mente de las personas, un cam-  
Enfrentar el pico artificial de petróleo en Cuba im-  
la obligación de detenerse si ven a alguien en el camino bio sociocultural asociado a una necesidad vital. Ello  
y que necesita llegar a algún lugar. Se les conoce como fue posible por las características previas a la crisis: se  
amarillos” a las personas que se encuentran en los ca- trataba de una sociedad insular, solidaria, educada y  
minos y carreteras para organizar a la gente que busca saludable, la cual llevaba ya 30 años de camino andado  
un auto-stop. Asimismo, en ciudades como Bayamo, se en su transición civilizatoria. Hasta hace dos años, Cuba  
sustituyeron los vehículos de motor por caballos y ca- era el único país en el mundo reconocido por tener un  
rretas (Nudelman, 2019).  
sistema socioeconómico sustentable, de acuerdo con  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
31  
el Foro Mundial para la Naturaleza (Nudelman, 2019). zación y abastecimiento del mercado interno es saluda-  
Quizás cabría explorar las formas en que la ecología y ble (Nudelman, 2019).  
el socialismo se encuentran, como formas que hacen  
El Centro Loyola, de Santiago de Cuba, es una orga-  
permisible la vida en el planeta. El ecofeminismo y el nización jesuita dedicada a la reflexión social y ecumé-  
ecosocialismo podrían arrojar algunas luces al respecto. nica, a la formación de trabajadores y a la protección del  
Como es posible ver hasta ahora, la práctica más medio ambiente a partir de la educación popular. Entre  
exitosa promovida en los ámbitos rural y urbano, des- otras actividades, trabaja en conjunto con la población  
de el periodo especial, para buscar soluciones al abas- campesina en la construcción y el intercambio solidario  
tecimiento energético-alimenticio, es la permacultura. de conocimientos individuales y colectivos con un in-  
Cada vez más fincas, parcelas y hogares en el campo terés común: trabajar en función del deterioro ético y  
y la ciudad la han adoptado como forma de diseñar y cultural producto de la crisis civilizatoria, caracterizada  
vivir con base en una agricultura permanente, en la que por la crisis ambiental que se acompaña de cambios en  
cada elemento del territorio se relaciona con los demás los modos de producción y consumo. Así, una de las  
cumpliendo varias funciones, y en la que se trata de apuestas del Centro Loyola es fomentar una forma de  
utilizar cada espacio disponible. La práctica de la per- vida más frugal respecto al consumo humano frente a  
macultura cada vez está más extendida en Cuba; su su medio. Ello solo es posible aprendiendo de las bue-  
intencionalidad es cubrir las necesidades energéticas, nas prácticas, o estilos de vida y de relación con lo otro  
alimenticias, espirituales, de vivienda y agua a partir basados en el respeto, la empatía, la armonía con la  
de relaciones cooperativas con la naturaleza y entre las naturaleza, con los valores de uso, con el intercambio;  
personas. La permacultura en Cuba parte de una visión prácticas corresponsables, con sentido de pertenencia  
sistémica, pues todos los elementos que componen el respecto al todo. Uno de los trabajos más relevantes de  
sistema de permacultura en una finca, una parcela o un esta organización es la creación de la Red de Saberes  
departamento están integrados; cada elemento cumple Populares, un proyecto parte del Programa InCuba del  
varias funciones, y cada función se sustenta en varios mismo Centro, y cuyos frutos se reflejan en documen-  
elementos que se articulan entre sí.  
tos en los cuales campesinos de varias generaciones  
Se trata de una forma de vida, de un enfoque y una y regiones de Santiago de Cuba describen y explican  
actitud frente a la gestión de las necesidades humanas. diversos saberes con la finalidad de intercambiar cono-  
Sus satisfactores aseguran que esta práctica está ba- cimientos entre distintas poblaciones para mejorar la  
sada en la acumulación de saberes de las sociedades calidad de vida de las familias (Nudelman, 2019).  
preindustriales, y también de los saberes y avances tec-  
Por otro lado, el Centro Oriental de Ecosistemas y  
nológicos de sociedades capitalistas y socialistas (Mor- Biodiversidad (Bioeco) de Santiago de Cuba, creado  
gan, 2006; Nudelman, 2019). Los permacultores viven como respuesta a los acuerdos de la Cumbre de la Tie-  
centrados en conservar al máximo la energía, por lo rra celebrada en Río de Janeiro en 1992, es un centro  
cual todo lo reciclan, a todo le encuentran un uso; bus- interdisciplinario dependiente del Ministerio de Ciencia,  
can la máxima eficiencia de cada componente del siste- Tecnología y Medioambiente, especializado en la con-  
ma. Ello va muy bien con la cultura cubana en general, servación y mejoramiento de los ecosistemas y la bio-  
ya que el cubano no bota nada a la basura; todo tiene diversidad de Cuba, y el desarrollo humano sostenible.  
un segundo o tercer uso. O cuarto. Inventa, resuelve, Bioeco define las buenas prácticas como aquellas prác-  
recicla, rehúsa, repara con lo que hay a la mano; por ticas que consideran al ser humano como una parte más  
eso, mientras más haya al alcance, mayores las posi- de la naturaleza. Por ello, desde hace 15 años fomenta  
bilidades de inventar una solución. A eso se le llama el fortalecimiento de una red de educadores ambienta-  
bricoleur, desde la antropología (Nudelman, 2019).  
les por vías no formales para facultar a la población y  
Como ejemplos de estas prácticas, solo hace falta a las instituciones, capacitando maestros de escuelas,  
observar las parcelas, fincas y organopónicos autosufi- logrando que los alumnos salgan del aula, conozcan su  
cientes en varios aspectos: producen tierra, fertilizan- entorno y entiendan que cuando se agrede al ambiente  
te orgánico, crían animales, manejan los desechos con se agrede a la vida misma (Nudelman, 2019).  
técnicas eficientes para producir biogás y biofertilizan-  
Este centro parte del principio de que las comunida-  
tes, cosechan alimentos con regadío automático, cap- des humanas son un componente más de la biodiversi-  
tan y potabilizan el agua de lluvia, y la calientan con dad, y su praxis se construye a partir del reconocimien-  
energía solar, en un complejo armónico que, a partir del to de los saberes, usos y costumbres de los pobladores  
trabajo de todos los miembros del hogar, les garantiza al interior de las reservas ecológicas, del intercambio  
energía, alimento sano y un ambiente limpio, fresco y de conocimientos y de la participación activa y directa  
bello, donde la producción de autoconsumo, comerciali- de los involucrados en torno al manejo sostenible de los  
3
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CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
componentes del medio. Se ocupa de la formación de  
organizaciones de base para permitir un mayor prota-  
gonismo a la participación comunitaria, prácticas enca-  
minadas a la toma horizontal de decisiones, a la des-  
centralización y al desarrollo autónomo a escala local.  
Afirma la necesidad de cambiar hábitos de deseo, de  
producción, de distribución, de valoración y consumo,  
lo cual implica un cambio cultural asociado a procesos  
pedagógicos comunitarios. En tal sentido, las metodolo-  
gías participativas de la educación popular han favore-  
cido el intercambio de conocimientos y el diálogo entre  
especialistas y pobladores, afianzando de esta forma  
relaciones horizontales en las cuales todos participan al  
momento de tomar las decisiones.  
cooperativa de materiales para la construcción que  
tiene programas propios de vivienda y métodos al-  
ternativos de edificación, como la captación de agua  
pluvial; una cooperativa de medicina tradicional (To-  
sepan Pajti), y una cooperativa que ofrece servicios  
ecoturísticos (Tosepan Kali). Los miembros de la  
Tosepan, variados cultural y profesionalmente (hay  
nahuas, totonacas y mestizos; campesinas, amas de  
casa, estudiantes, maestros, obreras, carpinteros),  
han sorteado la incertidumbre y la desesperanza  
característicos de la crisis actual, y han logrado ir  
más allá de sus expectativas, pues cuentan además  
con un sistema propio de educación en sus lenguas  
maternas y con una caja solidaria de crédito y aho-  
rro (Tosepan Tomin), cuyos excedentes son gasta-  
dos de acuerdo con las decisiones colectivas en las  
asambleas (Nudelman, 2019).  
5.  
Otros casos en América Latina  
5
.1. México  
Cuetzalan, en la Sierra Norte de Puebla, es un te-  
rritorio caracterizado por el tipo de relaciones empá-  
ticas, solidarias, cooperativas y recíprocas; además  
de la Unión de Cooperativas Tosepan Titataniske  
existen la Organización Masehualsiuamej Mosenyol-  
chihuanij, la Cooperativa Tonaltzin, y el Comité de  
Ordenamiento Territorial Integral de Cuetzalan (CO-  
TIC) (Combe, 2020). A partir de la reforma ener-  
gética de 2013, megaproyectos de minerías, frac-  
king e hidroeléctricas amenazaban el territorio de  
Cuetzalan, por lo cual las comunidades comenzaron  
a organizarse en asambleas para detener el avance  
de dichos proyectos, informando a la gente sobre  
las consecuencias de los mismos. En 2016 lograron  
clausurar simbólicamente la obra de una subesta-  
ción eléctrica de la Comisión Federal de Electricidad  
(CFE) en Cuetzalan. Como resultado, las CFE deman-  
dó a varios líderes de la resistencia por obstrucción  
de obra pública, fueron detenidos y encarcelados, y  
las comunidades tomaron la decisión de organizarse  
para conseguir la soberanía energética (apropiación  
de los flujos energéticos desde lo local, en comuni-  
dad, independiente de la red nacional) a través de la  
Asamblea de Pueblos Totonacos, Nahuas y Mestizos  
de la Sierra Norte de Puebla, y los proyectos de To-  
sepan Kaltaixpetaniloyan (centro de formación), un  
sistema autónomo de paneles solares, dos sistemas  
interconectados, dos sistemas autónomos pilotos  
con paneles solares, el hotel de turismo sustentable  
Talselotsin, la cooperativa de ahorro Tosepan Tomin,  
el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural, el  
Plan de aprovechamiento de energía para un consu-  
mo responsable y reparaciones a la red eléctrica, y  
En el documental “La energía de los pueblos”, de  
La Sandía Digital y la Fundación Rosa Luxemburgo  
Combe, 2020), se presentan otros tres casos de  
(
buenas prácticas en América Latina que valen la  
pena ser mencionados en este espacio.  
El caso de la Unión de Cooperativas Tosepan Ti-  
tataniske (“unidos venceremos, traducido del ná-  
huatl), en Cuetzalan, Puebla, es otro ejemplo de  
buenas prácticas en transición energética. A lo largo  
de 40 años han logrado conformase como una unión  
de cooperativas de producción, consumo y de servi-  
cios, organizada en torno a un modelo democrático  
participativo que adquiere sentido en cada asamblea  
general mensual. Convencidos de que trabajar uni-  
dos y organizados es la clave de la buena vida (o  
yeknemilis, en lengua náhuatl), tienen claro que es  
una situación crítica, de explotación y despojo, lo  
que les genera la necesidad de producir, distribuir  
y consumir según sus propios términos y necesida-  
des colectivas. Para el yeknemilis, los cooperativis-  
tas buscan vivir de manera sana, frugal, ética, lo  
cual implica una relación respetuosa con el otro; ello  
ha significado modificar el ordenamiento territorial  
de su municipio para detener el avance de la agro-  
química, las hidroeléctricas y las minas (Nudelman,  
2019).  
Con el fin de lograr su cometido, parten del tra-  
bajo productivo voluntario, cooperativo y recíproco,  
llamado faenas, y mediante la agricultura ecológi-  
ca producen alimentos desde la lógica del comer-  
cio justo, a bajos precios entre los asociados, en un  
complejo cooperativo en el que existe el trueque.  
También cuentan con una cooperativa de produc-  
ción agroecológica y de miel de abeja melipona; una  
unidades domésticas pilotos (Combe, 2020).  
En la comunidad de Xocoyolo, en Cuetzalan, y de  
acuerdo con Sofía Pacheco, de la Cooperativa Oner-  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
33  
gia (Combe, 2020), se parte de la idea de que son  
las propias comunidades las que tienen que decidir  
cómo producir la energía eléctrica y cómo consu-  
mirla, y participar directamente en la construcción  
de las tecnologías necesarias para ello, como la ins-  
talación y mantenimiento de sistemas comunitarios  
fotovoltaicos, y ello parte de la educación, de los  
procesos formativos y facultativos horizontales. De  
esta forma, y con el apoyo de organizaciones como  
Onergia, se han logrado establecer diversas coope-  
rativas energéticas, totonacas y nahuas.  
Por otro lado, la Organización Popular Francisco  
Villa de Izquierda Independiente (OPFVII), que nació  
en la Ciudad de México en 1988 ante la necesidad de  
vivienda digna, hoy plantea la autonomía total del  
Estado. Entienden a la energía como un medio para  
mejorar sus viviendas y construir hábitats dignos  
para las personas, lo cual implica, de acuerdo con  
Sandra Rativa (Combe, 2020), relacionar la energía  
con el agua, con la producción de alimentos y la cons-  
trucción de comunidad y organización popular. En la  
comunidad de Acapatzingo, Iztapalapa, por ejemplo,  
han logrado vincular los aspectos necesarios para la  
reproducción de una buena vida en un sentido in-  
tegral, construyendo una planta potabilizadora de  
agua que funciona con paneles solares instalados en  
los techos de los edificios y con el trabajo colectivo  
de “los panchos”, como se les conoce a los miembros  
de esta organización, para el mantenimiento del sis-  
tema, lo cual asegura la apropiación y sostenibilidad  
del proyecto, mediante procesos reflexivos, educati-  
vos y facultativos comunitarios (Combe, 2020).  
a la producción y consumo comunitario de energía  
eléctrica, ya que entienden la problemática energé-  
tico-civilizatoria en un sentido integral. Por tanto,  
también se organizan para llevar a cabo procesos  
facultativos, como talleres de carpintería, panadería,  
costura; además de actividades vinculadas directa-  
mente con el consumo energético y con la cons-  
trucción de formas dignas de vida. En asambleas  
acuerdan las cuotas para cubrir los costos de la pro-  
ducción, el consumo y el mantenimiento eléctrico,  
y han decidió que quien consume más, paga más,  
y la manera en que han logrado conseguir desarro-  
llar estos proyectos es a partir de la asociación libre  
entre comunidades y el trabajo cooperativo para la  
satisfacción de necesidades y la protección del am-  
biente.  
El éxito de los proyectos mencionados es posible  
no solo con el trabajo colaborativo, comunitario, sino  
gracias al diálogo de saberes entablado entre los ac-  
tores involucrados en los mismos proyectos: espa-  
cios de intercambio de experiencias y de reflexión  
sobre los procesos propios y ajenos. La transición  
energética, en tanto parte de la transición civilizato-  
ria hacia proyectos que permitan la reproducción de  
la vida, se constituye en torno a la defensa del te-  
rritorio, de la soberanía, la independencia y la vida,  
desde una postura anticapitalista, descentralizada y  
local. Compartir los saberes, y aprender a hacerlo  
para las distintas generaciones, con el objetivo de  
conservar y enriquecer la memoria histórica y co-  
lectiva que da sentido a las acciones cotidianas de  
transformación, se relaciona íntimamente con los  
procesos de educación popular. En tal sentido, para  
transitar en esa dirección debemos buscar respues-  
tas quizás no en los libros ni en la tecnología, sino en  
los regímenes ontológicos orientados por el cuidado  
de la vida: aquellas prácticas cotidianas de las co-  
munidades y los pueblos cuya ética se orienta hacia  
la regeneración, el cuidado, el otro (Leff, 2020a).  
5
.2. Guatemala  
En Zona Reina, Guatemala, en específico en la  
comunidad Unión 31 de Mayo, cuyo origen se en-  
cuentra en la Comunidades de Población en Resis-  
tencia (CPR), derivadas de la represión sufrida por  
las poblaciones mayas entre 1960 y 1996, existe la  
Cooperativa Luz de los Héroes y Mártires en Resis- 6. Conclusiones: buenas prácticas en transición  
tencia. Alejada de los servicios básicos ofrecidos por energética  
el Estado, Unión 31 de Mayo vive aislada y sin ac-  
ceso a la energía eléctrica (Combe, 2020). Sus for-  
Una transición energética justa y sustentable será  
mas de organización y toma de decisiones en torno posible solo si se plantea la cuestión como problema  
a asambleas comunitarias les ha permitido organi- complejo, y en tanto el objetivo sea la recuperación in-  
zarse para satisfacer aquellas necesidades sin contar tegral de los hábitats a partir del cuestionamiento sobre  
con el Estado. Un ejemplo de ello es la microcentral la relación de los seres humanos con los ecosistemas  
hidroeléctrica de la comunidad, en la cual desvían con los cuales coexiste. De esta forma, se abordaría la  
el 10% de un río para hacer funcionar la planta, do- cuestión energética desde una estrategia de integración  
tar de energía eléctrica a la comunidad, devolviendo multidimensional y sistémica.  
posteriormente el agua a su cauce natural.  
En tal sentido, sería posible decir que las buenas  
Sin embargo, las buenas prácticas no se reducen prácticas en transición energética:  
3
4
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
1.  
Tienen claridad política e ideológica, ya que parten  
del principio de que la transición energética no es  
axiológicamente neutra. Son corresponsables, se  
construyen desde el sentido de pertenencia respecto  
al todo. Refieren a estilos de vida y de relación con  
lo otro basados en el respeto, la empatía, la armonía  
con la naturaleza. Reconocen que la transición ener-  
gética es indisociable de la defensa del territorio y a  
soberanía alimentaria y la economía solidaria. Se re-  
lacionan con los nuevos ordenamientos territoriales  
en las ciudades, desde una planificación consciente  
del espacio para disminuir desplazamientos, mejorar  
el transporte masivo, lugar de trabajo, vivienda y  
recreación. De esta manera, las buenas prácticas en  
transición energética refieren también al uso de la  
bicicleta.  
la vida, al igual que la necesidad de establecer una 5. Por último, las buenas prácticas se construyen de  
ética colectiva orientada a construir un nuevo orden  
sociocultural, político y económico, sustentado en el  
diálogo entre las distintas racionalidades e identida-  
des; ello, al implicar un proceso de cambio ético-cul-  
tural, involucra un proceso pedagógico popular y  
emancipatorio. Entonces, las buenas prácticas en  
transición energética reconocen que esta cuestión,  
lejos de ser un problema científico o tecnológico, tra-  
ta de un problema filosófico, político y económico re-  
ferente a la autogestión colectiva de las necesidades  
y los medios para su satisfacción.  
manera colectiva a partir del intercambio de sabe-  
res y entre la diferencia; ello permite, entonces,  
robustecer lazos comunitarios en pos de un interés  
común, fortaleciendo relaciones solidarias, coopera-  
tivas, y en armonía con la naturaleza. Las metodo-  
logías participativas, como la investigación-acción,  
el aprendizaje basado en experiencias o las comu-  
nidades de aprendizaje posibilitan el despliegue de  
buenas prácticas en transición energética.  
Referencias bibliográficas  
2.  
Perciben que la transición energética refiere a un  
proceso en el cual intervienen distintas disciplinas Acevedo, R., Vásquez, C. y Torres, E. (2020). Princi-  
para su comprensión e intervención, pues entien-  
den que el proceso mismo se conforma a partir de  
la relación entre las partes que lo componen, y por  
lo cual plantean que la aproximación a la cuestión  
pios del pensamiento complejo en la formulación  
de políticas energéticas sustentables. Suma de Ne-  
gocios, 11 (24), 73-83. https://doi.org/10.14349/  
sumneg/2020.V11.N24.A8.  
energética debe darse desde la transdisciplina, e Bermejo, D. (2017). Crecimiento, decrecimiento y post-  
idealmente desde la interdisciplina.  
. Reconocen que actualmente hay un fuerte dominio  
crecimiento: Crítica al crecimiento. Euskadi: Euskal  
Herriko Uniberstitatea.  
3
técnico-matemático por parte de las ingenierías y las Blanco-Wells, G. (2019). La vida social de la energía:  
ciencias físicas y biológicas en el planteamiento y  
tratamiento de la transición energética, y dan su de-  
bido lugar a las ciencias sociales. No dejan de lado la  
apuntes para el estudio territorializado de las transi-  
ciones energéticas. Sociologías, 21, (51), 160-185.  
https://doi.org/10.1590/15174522-0215106.  
complejidad de las relaciones entre energía, socie- Castro, F. (1983). La crisis económica y social del mun-  
dad y medio ambiente, las necesidades relacionadas  
con la infraestructura, los marcos institucionales y  
legales en los cuales se desenvuelve, los contextos  
do, ponencia en la VII Cumbre de los Países No  
Alineados. La Habana: Oficina de Publicaciones del  
Consejo del Estado.  
históricos, las particularidades culturales, las formas Combe, M. (dir.). (2020). La energía de los pueblos  
de organización y participación sociopolítica y eco-  
nómica, y la geopolítica.  
[Documental]. La Sandía Digital, Oficina Regional en  
México de la Fundación Rosa Luxemburgo.  
4. Son aliadas de la permacultura. No son característi- Ferrari, L. (2021, 18 de julio). Vivir, todos, dentro de los  
cas de los grandes proyectos sino de aquellos que se  
desenvuelven a escala comunitaria, a partir de las  
necesidades, intereses, prioridades y capacidades  
locales. Este esfuerzo implica que cada comunidad,  
límitesplanetarios. La Jornada Ecológica. Recuperado  
de https://ecologica.jornada.com.mx/2021/07/18/  
vivir-todos-dentro-de-los-limites-planetarios-7925.  
html.  
a partir de sus identidades, sus potencialidades y International Energy Agency. (2020). Key World Energy  
particularidades culturales, alcance una calidad de  
vida digna y plena para cada uno de sus habitan-  
Statistics 2020. París: OECD Publishing. https://doi.  
org/10.1787/295f00f5-en.  
tes. En tal sentido, la organización de cooperativas Leff, E. (2020a). El conflicto de la vida. Ciudad de Méxi-  
resulta un rasgo de buenas prácticas en transición  
co: Siglo XXI Editores.  
energética. Asimismo, están asociadas a procesos Leff, E. (2020b, 10 de noviembre). Las Ciencias So-  
de desurbanización y recampesinización, ya que  
estos fortalecen los mercados locales en pos de la  
ciales en la transición hacia la sustentabilidad de  
la vida. Consejo Mexicano de Ciencias Sociales.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
35  
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3
6
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
CC, Vol.2. N° 2: 37-44. https//doi.org/ 10.48168/cc022021-004  
Saber vivir bien es un asunto de  
la Filosofía  
Filosofía y ciencias de la complejidad  
Knowing how to live well is a  
matter of Philosophy  
Philosophy and Sciences of Complexity  
Carlos Eduardo Maldonado  
Recepción: 14/09/2021  
Aceptación: 26/10/2021  
Resumen  
Este artículo sostiene una tesis, a saber: que saber vivir y vivir bien son un asunto distintivo de la filosofía,  
mucho más que de la ciencia, en general. Mientras que la ciencia consiste en una invitación a ver el mundo y la  
realidad tal cual son, la filosofía se caracteriza por un cambio de actitud frente a lo que es y lo que aparece. Por  
su parte, sin que sea el tema central aquí, el arte se distingue por crear mundos, realidades, experiencias y di-  
mensiones.  
Palabras Clave: Ciencias de la complejidad, vida, conocimiento, experiencia, cambio de actitud  
Abstract  
This paper claims that living well and knowing how  
to live are a particular issue of philosophy, distinctively,  
rather than a concern belonging to science in general.  
Whereas science consists in an invitation to face the  
la primera forma como observamos, contamos el uni-  
verso, y unimos experiencias, unos con otros, y con la  
naturaleza. El arte nos une a la naturaleza, pero tam-  
bién a los animales. Es sabido cómo también entre los  
animales existe arte, en general: el juego, la mímica,  
la música, las canciones, los relatos, una forma de ar-  
world and reality as such, philosophy is characterized quitectura, en fin, la danza. Desde los peces hasta los  
by a change of attitude vis-à-vis what is or appears. artrópodos, desde las ballenas hasta las aves, desde  
Furthermore, the arts are distinguished by creating  
los mamíferos hasta los arácnidos y los cefalópodos.  
brand new worlds, realities, experiences and dimen- Hasta donde sabemos. En el futuro, verosímilmente,  
sions; this however is not the main concern here.  
habremos de descubrir que también el arte existe en  
las plantas. Sin la menor duda, la ya está establecida  
la existencia del baile o la danza entre las plantas; los  
árboles, por ejemplo. Al fin y al cabo, recién en el año  
Key Words: The sciences of complexity, life, knowled-  
ge, experience, change of attitude  
2
006 se hizo el descubrimiento de la neurofisiología de  
Introducción  
las plantas. Desde entonces se ha venido ganando un  
enorme terreno.  
Las tres grandes áreas del conocimiento no las úni-  
cas- y de la vida son el arte, la ciencia y la filosofía.  
Originariamente, al arte precedió a las otras dos, y fue  
Para los seres humanos, después del arte vino la  
filosofía. Por lo menos en el relato oficial que nos ha  
llegado a partir de la Grecia antigua y algunos de sus  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
37  
antecedentes. Occidente emerge sobre los pilares de trumental y el esfuerzo de recuperación de las artes y  
la reflexión filosófica, la indagación por las causas, la la estética en la Escuela de Frankfurt, en general. Sin  
emergencia del pensamiento abstracto, en fin, el deba- olvidar, jamás las tres transformaciones, de camello en  
te argumentativo. Todo en la plaza pública. Sobre esta león, y del león en niño, en el Zaratustra de Nietzsche.  
base, tiene lugar también, entonces el nacimiento de Los ejemplos y casos pueden multiplicarse a granel.  
las incipientes formas de ciencia; las matemáticas pri-  
Hoy vivimos una profunda crisis, sistémica y sis-  
mero, la física luego, la geometría. Pero, tal y como la temática., como jamás la ha habido en la historia de  
conocemos, la ciencia es un invento perfectamente re- la humanidad gracias al carácter globalizado e inter-  
ciente que tiene lugar después del final de la Edad Me- dependiente de la cultura en general. Pues bien, este  
dia, atravesando por el Renacimiento, y en los orígenes texto sostiene que el llamado a llevar una vida buena,  
de la Modernidad. La ciencia, tal y como la conocemos, a saber vivir, y a vivir una vida plena suma qamaña,  
es un invento perfectamente reciente, que tiene apenas sumak kawsay, y utz k’aslemal, en quechua, aymara  
alrededor de cuatrocientos años.  
y quiché, respectivamente, por ejemplo-, es el oficio  
Ahora bien, las relaciones entre arte, ciencia y filo- exactamente de la filosofía, y se aportarán argumentos  
sofía no siempre han sido armónicas. No bien nace la de diversa índole. La tesis enunciada se apoya en tres  
filosofía, Platón expulsa a los poetas de su República, argumentos. El primero explora el sentido, la extensión  
y Aristóteles le hace eco reduciendo a las artes a un y la profundidad de lo que comporta saber vivir, esto  
nivel bastante inferior en las escalas de conocimiento. es, vivir bien. Se trata de un argumento de tipo epis-  
El resto es historia. Por su parte, el nacimiento de la temológico. El segundo afirma que saber vivir bien es  
ciencia marca tajantemente la división con respecto a un tema que se dirime de cara la naturaleza. El tercer  
la filosofía. Es lo que sucede con Descartes primero, y argumento reevalúa el sentido y el significado de la fi-  
luego también con Kant y con Comte.  
losofía de cara a las ciencias de la complejidad y explica  
El lastre de formas jerárquicas de conocimiento y por qué razón esto es importante. Al final se extraen  
con ellas, formas jerárquicas de organización y de es- algunas conclusiones.  
tilos de vida marca y atraviesa de un extremo al otro a  
las relaciones entre arte, filosofía y ciencia.  
1. ¿Qué es saber vivir bien?  
Epistemológicamente, el arte siempre ha precedido  
y anticipado a la ciencia y a la filosofía. Es el ámbito de  
No es suficiente con vivir, simplemente. Ese es, sería  
la libertad y de la imaginación par excellence. La ciencia un tema simple y llanamente biológico. La teoría de la  
consiste, dicho de manera simple pero directa, en una evolución en su versión darwiniana, y su extensión a  
invitación a ver, a encontrarnos, a enfrentar lo que hay, la síntesis neodarwiniana sería suficiente para ello. El  
lo que sucede, lo que acaece, lo que está allí. Es el lla- tema ciertamente hunde sus raíces en la biología, pero  
mado a la realidad tal cual es, independientemente de la supera con mucho.  
nuestros deseos. Este es su mérito.  
Ya decía Heráclito, el Oscuro de Éfeso, que la mayo-  
Por su parte, las artes no se interesan tanto por la ría de la gente son muertos vivientes. Zombies, diría-  
realidad sino, consisten en una superación de la misma. mos hoy en día, con el trasfondo de Hollywood. “Inmor-  
El arte crea mundos, crea realidades, hace posibles di- tales mortales, mortales inmortales: viviendo la vida  
mensiones y experiencias de otra forma inimaginadas. de aquellos, la vida de aquellos muriendo” (D-K, 62)  
El arte enfrenta a la realidad superándola, creándole (Gigon, 1971; Mondolfo, 1986; Kirk y Raven, 1981).  
otra(s) realidad(es) antes perfectamente inconcebibles. Digámoslo de manera breve y directa: la mayoría de  
Las artes no se interesan por la realidad en cuanto tal. las gentes son muertos vivientes; y no lo saben. Y aná-  
Sino, por decir lo menos, por sus modalidades.  
logamente a lo que sucede con los zombies, en libros  
Por su parte, la filosofía se encuentra en algún lugar o en películas, persiguen a los vivientes y quieren ma-  
intermedio entre el arte y la ciencia. Dicho de manera tarlos para convertirlos en otros zombies. Un zombie  
puntual, la filosofía consiste en la invitación a cambiar sólo sabe de sí mismo. Significativamente, se trata de  
la actitud ante la realidad. Se trata, primero, del mito muertes vivientes sin cerebro: no piensan, no deciden,  
de la caverna, en el Libro VII de la República (Politeia) carecen de criterio propio, de cualquier sentido de  
de Platón, y luego de la epojé entre los estoicos. Se autonomía, son gregarios, nada saben de imaginación  
trata, asimismo, de la skepsis a partir del escepticismo y libertad, hacen lo que hacen todos los zombies. Herá-  
antiguo, hasta la duda metódica cartesiana, son olvi- clito, el preclaro.  
En la Grecia antigua existían dos términos para de-  
signar a la vida: bios y zoé. El primero es idóneo tan  
sólo para aquellos seres que han decidido tomar el des-  
dar jamás la ironía de Sócrates. En fin, cabe mencionar  
también, por ejemplo, los análisis del lenguaje desde  
Bacon hasta Wittgenstein, y las críticas a la razón ins-  
3
8
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
tino en sus propias manos. El segundo designa, en con- de la felicidad, fue el hecho de que los pueblos andinos  
traste a los vivientes en los que la vida vive a través notablemente, Bolivia, Perú y Ecuador- sabían desde  
suyo, son instrumentos. En Aristóteles, se trata de los siempre acerca de la importancia del saber vivir y el  
animales; en una lectura contemporánea, se trata de vivir bien. Políticamente, los gobiernos de Evo Morales  
todos aquellos que viven en y al servicio de Institu- y de Rafael Correa estaban en su auge, digamos, como  
ciones: la Iglesia, el Ejército, el Estado, la Empresa, la un hecho contextual. Pues bien, Occidente descubrió  
Corporación, o cualquier otro. Todo el pensamiento ins- que la calidad de vida y la dignidad atraviesan transver-  
titucionalista cobra aquí sus profundas raíces.  
salmente por un tema tan básico como eso: saber vivir  
De suerte que la vida, en su sentido primero bios- bien; y de ello, significativamente, no se puede hacer  
designa a quienes se atreven a tomar el destino en sus un código, una política, una receta o un algoritmo. El  
propias manos; y sólo éstos son verdaderamente libres. suma qamaña y el sumak kawsay anclan profundamen-  
La historia, notablemente, de la literatura está repleta  
te en la sabiduría andina y en toda una cosmovisión uno  
de casos que ilustran esta forma de vida; la única for- de cuyos pilares son la lengua quechua y el aymara,  
ma de vida verdadera. Pues bien, ya los griegos tenían  
un concepto para el bien vivir, o el saber vivir: la eu-  
praxein, cuyo sustantivo es la eupraxis; literalmente la  
lenguas vivas, a diferencia del griego antiguo y del latín.  
Desde el puntode vista de las ciencias ylas disciplinas,  
el aprendizaje por parte de Occidente- acerca del saber  
buena (eu) vida (praxis): eupraxía, que designaba q la vivir bien procede de la economía, se orienta hacia la his-  
felicidad, al éxito, a la capacidad de manejar bien (un toria, pero se nutre de la etnografía y la antropología. La  
navío), y también a la acción de hacer el bien. Respec- traducción elemental consiste en lo siguiente: un sistema  
tivamente, en Píndaro, Las Olímpicas, 8, 14; en Tucí- económico en profunda crisis sistémica y sistemática el  
dides, en Antifón, en Platón, en Las Leyes, 732c, en liberalismo, el sistema de libre mercado- necesita motivos  
Isócrates, 197b, en Platón, en el Eutidemo, 279e, en el para alimentar esperanzas acerca de un modelo en crisis y  
Alcibíades de Platón, 116b.  
que no aguanta más; los primeros diagnósticos emergen,  
El eupraxein o la eupraxía designaba, pues, el sa- recientemente, a partir de los primeros Informes al Club  
ber manejar bien las situaciones, no sucumbir ante de Roma, atraviesa por los límites planetarios del Instituto  
las tormentas, y hacer el bien, metafórica tanto como Stockholm y se proyecta en numerosos otros diagnósti-  
literalmente. Entonces, claro, se conocía el éxito y la cos, todos similares. Al cabo, sin la menor duda, la crisis  
felicidad, las cuales, como se aprecia fácilmente nada es civilizatoria. Occidente sencillamente nunca supo vivir,  
tiene que ver con grandes campañas, grandes acciones, no supo vivir bien, y jamás hizo del tema de llevar una  
grandes empresas, sino, siempre, con la vida cotidiana. vida plena su principal y ni siquiera una de sus principales  
Sabiduría pura, de la mejor.  
De manera significativa, el tema se diluye a lo largo mercado, vida para el trabajo y la enajenación.  
de la historia de Occidente. La religión en rigor, las re-  
Vivir bien es un tema que implica, mucho más que  
preocupaciones. Todo fue vida para la guerra, vida para el  
ligiones monoteístas y reveladas se imponen, a sangre ciencia, información y educación, además y principalmen-  
y fuego, imponiendo consiguientemente otras actitudes te, mucha sabiduría. Occidente jamás hizo de la sabiduría  
y relaciones, todas infundadas en el miedo, el castigo un tema mayor de consideraciones. Lo suyo fue siempre,  
y sistemas punitivos. Total ausencia de libertad. Entre la ciencia, la filosofía y el arte, dicho en general; ditto.  
tanto, a lo largo de sus cerca de 2500 años, Occidente  
Pues bien, el tema de base radica en el reconoci-  
entró en una profunda crisis sistémica y sistemática. miento expreso de que no existe y manifiestamente  
En algún momento en el ápice de esta crisis, la London no en toda la historia de Occidente- una propedéutica,  
School of Economics, descubre, hacia el año 2001, de una metodología o una lógica de o hacia la sabiduría. Lo  
un lado, que la felicidad es importante para el desarro- de Occidente fue siempre la fama, el éxito, la riqueza,  
llo de las sociedades. Este descubrimiento tiene lugar el entendimiento, la razón y el poder; y sus variaciones  
a raíz del hecho de que Bután, un pequeño país en las y derivaciones.  
montañas del Himalaya, de credo budista, formuló un  
Como se observa, el eupraxein y la eupraxía que-  
plan de desarrollo a cien años, cuyo primer punto era dan tan sólo como referentes etimológicos y teóricos,  
la felicidad. Jamás antes, específicamente a partir de la puesto que en la experiencia de la cultura y la historia  
modernidad, la felicidad había sido considerada como no existieron para nada, una vez que la Grecia antigua  
un tema nacional, estratégico, de plan de desarrollo, y hubo desaparecido. De manera que existe un salto his-  
mucho menos a cien años vista. Desde entonces, nota- tórico impresionante de alrededor de 2500 años para  
blemente en los indicadores Gini, se comenzó a intro- el re-descubrimiento de aquello consistente en saber  
ducir a la felicidad como un tema de desarrollo humano. llevar una vida buena. Por consiguiente, en el reconoci-  
El segundo descubrimiento, casi contemporáneo al miento de que temas como el poder, el éxito, la fama,  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
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la riqueza y el entendimiento no son precisamente los plantea de cualquier manera menos como una relación  
principales valores, actitudes o relaciones de una vida definitiva o determinantemente antropológica. Cierta-  
bien llevada. Todo un golpe para la tradición encefalo- mente que Protágoras ocupa un papel destacado cuan-  
céntrica y todas sus aristas y expresiones. Dicho en el do se indaga acerca de algo así como una antropología  
lenguaje de la economía: todo un desafío al crecimien- filosófica. En contra suya digamos dos cosas: primero,  
to económico, el desarrollo, la productividad, y demás; que era un sofista, lo cual a la luz de la historia oficial  
esto es, para cualquier modelo económico de tipo pro- de la filosofía no es precisamente un cumplido. Y se-  
ductivista y, ulteriormente, extractivista.  
gundo, de manera aún más fuerte pero indirecta, que  
Los pueblos, verosímilmente “atrasados”, “pobres” y fue contemporáneo de Sócrates, y es con Sócrates, de  
subdesarrollados” de los Andes –dicho desde la pers- acuerdo con la lectura de Nietzsche (2013), con quien  
pectiva del “desarrollo” y la “gran civilización occiden- comienza la decadencia de Occidente, la decadencia de  
tal- sí han sabido lo que es vivir y llevar una vida que la experiencia humana. No es éste el lugar para pon-  
se define en términos significativamente mejores y muy derar el juicio nietzscheano. Por ello, por politeísta y  
distintas a la calidad y a la dignidad, valores distintiva- pagana aún sabía la Grecia antigua algo- acerca del  
mente antropocéntricos y occidentales. Un motivo de buen vivir. Pero muy pronto se imponen otras actitudes,  
reflexión.  
Un rasgo sobresaliente de la sabiduría andina con-  
otras creencias, otras relaciones.  
Es a partir del momento en el que los seres humanos  
siste en la ausencia de jerarquías. Antes bien, las cultu- adoptan una actitud extractivista ante la naturaleza que  
ras mesoamericanas y aquellas aún prevalecientes hoy el tema cambia por completo. Pues bien, el extractivis-  
en Abya Yala se organizan y viven: a) relativamente a mo comienza, mucho antes del “Génesis” en el Libro  
la naturaleza, b) en términos de heterarquías (Maldona- de los Libros, en la Política de Aristóteles, allí donde el  
do, 2021a). En quiché, cabe mencionarlo, el verdadero Estagirita concibe a la naturaleza como un medio para  
poder consiste en servir a los demás, no tener fuerza, los fines, necesidades e intereses de los seres humanos  
influir en los demás, tomar decisiones (“los tomadores (Aristóteles, 1988: Libro 1).  
de decisión”) y cosas semejantes, de suerte que es todo  
lo contrario a las ideas clásicas, incluso con sus deriva- con respecto a las creencias, valores, comportamien-  
ciones como “empoderamiento” (horribile dictum).  
tos, gustos y necesidades que sugiere o impone la cul-  
Vivir con la naturaleza implica una fuerte distancia  
Simple y llanamente vivir bien significa poner a la tura. La cultura nos hace desear cosas que no nece-  
vida en todas sus expresiones, niveles, manifestaciones sitamos; particularmente en el capitalismo. Para ello,  
y fenómenos- en el primer lugar, y reconocer por tanto la publicidad y la propaganda, el diseño en general  
a todo lo demás como subsidiario, en el mejor de los ca- (diseño industrial diseño gráfico, diseño textil y otros)  
sos. Occidente puso en primer lugar la lista no es en ab- y el mercadeo fungen como factores determinantes  
soluto exhaustiva- a la razón, a la República, al Imperio, para el consumo. Consumir significa crecer económica-  
a la Iglesia, al Estado, al Partido, en fin, a la Empresa y la mente, de acuerdo con una creencia equivocada pero  
Economía (todas con mayúsculas), por ejemplo-, siem- muy acendrada. Y claro, los centros comerciales están  
pre por encima de la vida. Y por eso mismo, Occidente hechos para crear la sensación de libertad (Marcuse,  
jamás supo de nada semejante y ni siquiera próximo a 1969a; 1969b; 1969c). Todo se conjura para hacer a  
vivir bien. Elaborar esta historia, es equivalente a escribir los seres humanos seres necesitantes. Nada más aleja-  
una historia del olvido. (Para un buen conocedor algún do del buen vivir.  
Saber vivir bien significa, simple y llanamente, saber  
eco heideggeriano resuena en el fondo, quedo).  
Saber vivir significa que los tiempos verdaderos son qué se necesita verdaderamente y qué no. Y lo cierto es  
los tiempos de la naturaleza, no los tiempos humanos; que la inmensa mayoría de cosas (= productos, mer-  
eufemísticamente dicho: “los tiempos de la cultura”. Y cancías) no son necesarios en absoluto. La cultura ata,  
los tiempos de la naturaleza poseen una densidad in- en tanto que la naturaleza libera.  
mensamente mayor que los tiempos que la cultura, en  
Vivir conforme a la naturaleza significa saber a cada  
cualquier acepción, en cualquier tono, en cualquier in- momento qué se necesita y qué no, qué es importante  
terpretación que se quiera, puedo jamás haber asumi- y qué es pasajero, qué es permanente y qué es aleato-  
do. Veleidad y falsos sueños.  
rio. Como se aprecia sin dificultad, el tema es filosófico  
en el sentido primero de las relaciones que cada quien  
tiene hacia los demás, hacia el mundo, hacia el tiempo  
y hacia la existencia misma. Saber vivir es mucho más  
2.  
Saber vivir bien es vivir con la naturaleza  
La Grecia antigua es aún pagana y politeísta, de que un asunto de ciencia en cualquier acepción de la  
suerte que el asunto relativo a llevar una vida buena se palabra, un tema distintivo de la filosofía. No se trata  
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CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
simple y llanamente de reconocer lo que hay y cómo es mología, de un lado, y la física cuántica de otra parte,  
y se comporta, sino de transformar la actitud o la forma ponen de manifiesto que los cuerpos sólidos constitu-  
de vida frente a aquello que acaece, que está ahí, lo yen una ínfima minoría en la vastedad del universo. La  
dado y lo que clásicamente se asumió como “el ser”. La inmensa mayoría del cosmos está vacío. Una manera  
filosofía es, dicho en una palabra, un llamado al cambio puntual de señalar este hecho es el reconocimiento de  
de la forma, el estilo, o el estándar de vida. De un lado, que la materia bariónica compone apenas cerca del 4%  
como un asunto personal como en Platón o en Hus- del universo y que el restante 96% es energía oscura  
serl, por ejemplo-, pero, de otra parte, además, como y materia oscura, y que, a la fecha, sencillamente no  
un tema social, colectivo o histórico como en Spinoza sabe con precisión en qué consisten. A su vez, de otra  
o en Marx, por ejemplo-. La filosofía es un cambio de parte, la bioquímica ha puesto de relieve que de ese  
la actitud como un cambio del mundo, y no es tanto 4% de materia bariónica, a su vez, el átomo está esen-  
una aceptación del mundo y de las cosas como llegan cialmente vacío, y que el cuerpo humano, la realidad y  
o se viven como una invitación a una revuelta contra las cosas en general están vacías. Una idea manifiesta-  
las cosas tal y como aparecen. La mayoría de filósofos mente contraintuitiva, desde donde se mire.  
han subrayado del cambio de la actitud natural hacia  
La conclusión no puede ser más evidente y no pue-  
una actitud filosófica; algunos filósofos, han puesto de de dejar de anticiparse: una filosofía de la naturaleza,  
relieve el llamado a un cabio del mundo, de la sociedad, como una sabiduría de la vida consisten en una ciencia,  
de la estructura y de la realidad misma. En este senti- un arte, y una filosofía del vacío. He aquí el más hermo-  
do, la filosofía se acerca más al arte en general que a so de los oximorones: el ser es vacío (Smethan, 2010;  
Sabbadini, 2017; Damdul, 2019)1.  
la ciencia.  
Para quien, la expresión más directa e inmediata de  
El vacío: la más contraintuitiva de las ideas en el  
la naturaleza es su propio cuerpo. El cuerpo de cada contexto de la ciencia, la filosofía y la cultura occidenta-  
quien Leib, en su expresión en alemán, que designa al les, acostumbradas a plenitud, relleno, coseidad, fisica-  
cuerpo vivo, en contraste con el Körper, que denota a lidad, concreción todas, ideas centradas en torno a la  
los cuerpos físicos, inanes-, la experiencia más autén- importancia de la percepción natural, y los sentidos en  
tica de la naturaleza en general. O también, desde otro el sentido primero de la palabra-: lo real es lo que se ve,  
punto de vista, la naturaleza habla a cada quien de for- se toca, se coge, se siente (LeShan y Margenau, 2009;  
ma inmediata a través del cuerpo y como los lenguajes Ackerman, 1992). Pues bien, todos parece indicar que  
del cuerpo. De esta suerte, una verdadera filosofía no es justamente al contrario: las cosas más “reales” son  
es tanto filosofía de la razón, el entendimiento, la con- intangibles, inmateriales, vacías.  
ciencia, el alma, y demás, sino, más originaria y radi-  
Dicho de manera elemental: la sabiduría no descan-  
calmente, es además y fundamentalmente, una filosofa sa en las cosas, sino en un distanciamiento con res-  
del cuerpo. El cuerpo como la unidad de la vida, de tal pecto a ellas. Una idea simplemente provocadora en  
modo que saber vivir equivale a escuchar al cuerpo y contextos en los que lo que se exalta es el tener, el  
saber del cuerpo como del texto en el que se sedimenta haber, el ser, como condiciones para la calidad de vida  
la existencia en el sentido más pleno y fuerte de la pala- y la dignidad de la vida. Pues bien, todos los modelos  
bra. Una sabiduría de la naturaleza es al mismo tiempo económicos pasados y vigentes ignoran completamente  
sabiduría del cuerpo.  
estas ideas. Y con ello, no pueden resolver, en absolu-  
La fenomenología de lo que ello comporta implica to, el tema del buen vivir centrados, como lo están,  
aspectos tales como saber alimentarse, saber amar, sa- en riqueza, consumo, bienestar material, crecimiento,  
ber vivir el instante, saber lanzarse a los abismos como desarrollo, y demás-. Lo anterior, sin embargo, en ma-  
a los sueños mismo y hacer lo imposible posible y real, nera alguno de be ser entendido como una apología  
saber vivir con las inclemencias del tiempo y el clima indirecta a la pobreza, la escasez, la exaltación de las  
tanto como con los momentos de solaz y alegría, en necesidades y demás. Una pretensión semejante sería  
fin, saber que la vida es una sola y que esta ancla en sencillamente supina.  
el cuerpo y es desde el cuerpo mismo desde donde se  
La filosofía constituye quizás la mejor puerta de ac-  
lanza para que el espíritu conozca la felicidad, el cono- ceso a la sabiduría. Muchos más, sin ambages, que la  
cimiento y la plenitud. Una fenomenología del cuerpo ciencia, dicho en general.  
ocuparía un espacio que sobrepasa con mucho a un ar-  
1
Una observación puntual: no deja de ser curioso: a) que la  
mayoría de la bibliografía en el tema sea de autores orientales  
India, Nepal, etc.), y b) que la mayoría de textos se publiquen  
en editoriales distintas al mainstream. Un tema relativo a la  
sociología del conocimiento.  
tículo; sin embargo, sí es posible señalar con precisión  
hacia las dimensiones de la sabiduría.  
Una precisión, anclada en lo mejor de la ciencia de  
punta, se impone en este punto. La astronomía y la cos-  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
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3. Reevaluando la filosofía de cara a la compleji- orgánico con la naturaleza o el mundo. Pues bien, una  
dad  
relación semejante comporta toda una forma de vida, y  
es bastante más que sencillamente una heurística, una  
Hemos dicho que la filosofía se distingue por ser un lógica o una metodología.  
llamado vehemente y radical a cambiar de vida, indivi-  
Al mismo tiempo, es preciso observar que, bien en-  
dual o colectivamente. (Esto, dicho en passant, explica tendidas, las ciencias de la complejidad no son más  
por qué razón la filosofía es políticamente incorrecta). ciencia que arte, no más filosofía que ciencia, en fin,  
En otras palabras, se trata de la antípoda a cualquier no más teoría que práctica. Los dualismos, los reduc-  
tipo de pensamiento de corte institucionalista, literal o cionismos, los determinismos y los mecanicismos de  
metafóricamente. Antes que simplemente ver “al ser”, cualquier índole desaparecen, se diluyen, digamos. No  
aceptarlo tal cual es el ser o lo que aparece, o como existen jerarquías de conocimiento, y consiguientemen-  
se quiera abordar el tema desde la epistemología; aquí te tampoco jerarquías de formas o estilos de vida. Esto,  
da igual-, la filosofía consiste en un rechazo del ser en a decir verdad, es algo que aún no termina de ser evi-  
tanto que cambio de la actitud hacia lo que es o lo que dente para la gran mayoría de académicos e investiga-  
aparece. Prácticamente toda la historia de la filosofía dores que trabajan en complejidad en cualquier sentido  
puede condensarse en esta idea: el Mito de la Caverna de la palabra. Existe aun implícitamente, por decir lo  
o el mito de las aguas del Río Lethé, en la República de menos, distinciones de ciencias y disciplinas, jerarquías  
Platón; la ironía socrática; la epojé estoica o el espíritu de lenguajes y aproximaciones.  
crítico y libre de los cínicos, la duda metódica de Des-  
De suerte que cuando se piensa en complejidad  
cartes, el llamado a la libertad sin parangones de Spi- se piensa más allá de las distinciones entre ciencias,  
noza, en fin, sin ser prolijos, la filosofía fenomenología disciplinas, prácticas, y saberes. Un buen pensador no  
de Husserl, la muy puntal tesis 11 sobre Feuerbach de piensa con categorías; pensar significa, originaria, ra-  
Marx, la experiencia radical del rostro del otro en Lévi- dicalmente, pensar sin categorías (Maldonado, 2019),  
nas, la angustia de Merleau-Ponty en el encuentro entre pues las categorías nos impiden ver el mundo o la na-  
lo vivible y lo invisible, por ejemplo. Toda gran filosofía turaleza o la vida de diversas maneras y son siempre  
es una fantástica invitación a cambiar las cosas, por autorreferenciales. Es justamente todo el ámbito de un  
lo menos, cambiando la actitud ante ellas. Radicalidad, pensamiento deductivo o hipotético-deductivo. Debe-  
libertad, independencia.  
mos poder ver el mundo sin pre-conceptos, pre-juicios,  
Pues bien, existe una muy estrecha relación entre la  
pre-comprensiones. Algo extremadamente difícil que  
filosofía, a entendida, y las ciencias de la complejidad coincide, plano por plano con la exigencia de las cien-  
Rescher, 1998; Couloubaritsis, 2014). Las ciencias de  
cias de la complejidad, a saber: los sistemas complejos  
(
la complejidad son ciencias de posibilidades y ciencias son abiertos y para ver sistemas abiertos es indispen-  
de la vida (Maldonado, 2021b). Y asimismo, las ciencias sable tener una estructura de mente abierta. Algo que  
de la complejidad comprenden a los fenómenos, sis-  
temas y comportamientos de complejidad creciente a  
partir de los grados de libertad que éstos tienen o que  
exhiben.  
se dice fácilmente, pero es muy difícil de llevar a cabo.  
Los antiguos griegos y romanos, principalmente-  
creían que la filosofía es la soberana de las ciencias y las  
artes. Una pretensión veleidosa, si las hay. Nadie pue-  
de pretender la sabiduría afirman o creyendo en jerar-  
No obstante, se impone una observación importan-  
te. Pensar en términos de complejidad es bastante más quías, en parcelas, en feudos o en separaciones. Para  
y muy diferente a pensar simplemente en términos de ello contribuyen, de manera significativa, las ciencias  
inter, trans y multidisciplinariedad. Se trata, antes bien, de la complejidad. El sabio no es precisamente aquel  
de alcanzar el gran cuadro (big picture) del asunto del todo lo sabe, o que sabe mucho (éste es el erudito).  
cual nos ocupamos, en cada caso (De Rosnay, 1977; Mucho mejor, es aquel o aquella- que lo comprende  
Carroll, 2017). Dicho en términos cognitivos, pensar en todo, en el sentido precisamente del big picture men-  
complejidad es bastante más que sencillamente hacer  
cionado. Conocer o saber no cumplen necesariamente  
epistemología. Importante como es, la epistemología, una función terapéutica o sanatoria. Por el contrario,  
en toda la extensión de la palabra, es tan sólo una he- comprender las cosas cumple una función liberadora,  
rramienta para una meta mayor, a saber: tener una esperanzadora, y tanto conduce a la sabiduría como  
comprensión integral, de gran alcance, a largo plazo, que nos transforma. El auténtico eureka no es un acto  
sobre el tema que nos ocupa en cada caso; el mundo de conocimiento; es un acto de entendimiento o com-  
en general, o una parte del mismo. Debemos poder su- prensión, dos cosas perfectamente distintas.  
perar los tecnicismos, por minimalistas, a fin de alcan-  
La ironía socrática tiene todo el sentido del mundo.  
zar una comprensión que implique una relación de tipo Literal y metafóricamente hablando (Vlastos, 1992). Se  
4
2
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
trata del llamado o la invitación a reconocer que lo ver- que las buenas costumbres y la cultura usual parecen  
daderamente importante no consiste en saber, sino: a) indicarlo. Cuando veamos a un hombre o una mujer  
en vivir lo que se sabe, y b) en entender las cosas, que sabios, lo mejor es acercarnos a ellos y aprender. Pues  
es mucho más y muy diferente a simplemente conocer nunca enseñan; aunque si es posible aprender la sabi-  
las cosas. Comprender nos hace libres; saber en mu- duría; la sabiduría: esa que no se exponen en tratados  
chas ocasiones nos ata. Digamos, obiter dictum, que los y en volúmenes enteros, sino en breves legajos sueltos,  
dioses de los paganos, tanto como esa diosa singular en gestos amables, allí donde emerge la serenidad y la  
de Spinoza que es la naturaleza, no se caracterizan, en alegría. Un tema poco obvio.  
absoluto, en contraste con el El Dios Omnisciente de  
las tres religiones reveladas constitutivas de Occidente, Referencias bibliográficas  
por saberlo todo. Muchas cosas las ignoran; los dioses  
aztecas como los incas, los indios como los chinos, los Ackerman, D., (1992). Una historia natural de los senti-  
escandinavos como los africanos. Pero son dioses que  
dos. Barcelona: Anagrama  
comprenden. Y así son más humanos que los dioses de Aristóteles, (1988). Política. Madrid: Ed. Gredos  
las tres religiones del desierto.  
Carroll, S., (2017). The Big Picture. On the Origins of  
Life, Meaning, and The Universe Itself. New York:  
Dutton  
Más humanos, es decir, más cercanos a la vida.  
Couloubaritsis, L., (2014). La philosophie face à la  
question de la complexité. Le défi majeur du 21e  
siècle. Tome 1: Complexités intuitive, archaïque et  
historique. Tome 2: Complexités scientifique et con-  
temporaine. Bruxelles: Ousia  
4
.
Conclusiones  
No existe una clave, un algoritmo o una regla de oro  
para saber vivir bien; esto es, para llevar una vida ple-  
na. Nadie puede enseñarle a nadie a vivir bien; pero sí Damdul, G. D., (2019). “Ontological Reality: Quantum  
se puede aprender. Entre vivir bien y las ciencias de la  
complejidad existe una comunidad de espíritu, a saber:  
se trata del descrédito de cualquier semejante a una  
regla de oro. Este rasgo las unifica y consolida.  
Theory and Emptiness in Buddhist Philosophy”, en:  
Bhatt, S. R., (Ed.), Quantum Reality and the Theo-  
Este artículo es un esfuerzo por considerar en qué De Rosnay, J., (1977). El macroscopio. Hacia una visión  
consiste vivir una vida buena a la luz de las ciencias de  
global. Madrid: AC, D.L.  
la complejidad. Si bien saber vivir es distintivamente un Gigon, O., (1971). Los orígenes de la filosofía griega.  
asunto filosófico, la filosofía no se erige como soberana  
Madrid: Ed. Gredos  
de las ciencias y las artes, como querían los antiguos. Kirk, G. S., y Raven,J. E., (1981). Los filósofos preso-  
Una pretensión veleidosa, a decir verdad.  
cráticos. Historia crítica con selección de textos. Ma-  
Sabe vivir, llevar una vida plena o vivir bien no es  
drid: Gredos  
tanto un asunto de conocimiento o erudición aunque LeShan, L., y Margenau, H., (2009). El espacio de Eins-  
manifiestamente puede pasar por aquí; no hay abso-  
lutamente ningún problema-. Saber vivir bien significa  
tein y el cielo de Van Gogh: un paso más allá de la  
realidad física. Barcelona: Gedisa  
ponderar las cosas adecuadamente; saber a qué debe- Maldonado, C. E., (2021a). “La gestión compleja: de  
mos temerle y a qué no, y ser libres. Libres y felices,  
aunque le verdadera felicidad no siempre arranque car-  
cajadas estruendosas, necesariamente.  
la jerarquía a las redes complejas y la heterarquía”,  
en: Revista Ciencias de la Complejidad (próximo a  
publicarse)  
Desde cualquier punto de vista, saber vivir bien sig- Maldonado, C. E., (2021b) Las ciencias de la vida son  
nifica carecer de temores, pues, en términos muy ele-  
mentales, el mal puede ser identificado fácilmente en  
ciencias de la complejidad. Santiago de Chile: Ed.  
Trepen  
cuanto que nos roba tiempo y energías o nos introduce Maldonado, C. E., (2019) Turbulencias. Sobre ciencia y  
energías y tiempos que no nos son propios.  
Con todo y una observación final: el hombre o la  
mujer sabios no se anuncian, no vociferan, no se ven-  
otras complejidades. T. I y II. Bogotá: Ed. Univer-  
sidad El Bosque. Tomo I: pp. 1-486; Tomo II: pp.  
1-270  
den a sí mismos. Caminan, como decía Nietzsche, por Marcuse, H., (1969a). El hombre unidimensional. Ensa-  
el mundo, pasos de palomas; imperceptible, acaso, in-  
yo sobre la ideología de la sociedad industrial avan-  
visiblemente (en contraste con los pasos y avanzadas  
zada. México: Joaquín Mortiz  
militares y muchas otras similares). Existe, alrededor Marcuse, H., (1969b). Un ensayo sobre la liberación.  
México: Joaquín Mortiz  
nuestro, mucha más gente que saber vivir bien, de lo  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
43  
Marcuse, H., (1969c). El fin de la utopía. México: Siglo  
Rethinking Reality Through Quantum Physics. Pari  
XXI Editores  
Publishing  
Mondolfo, R., (1986). Heráclito. Textos y problemas de Sextos Empiricus, (1990). Outines of Pyrrhonism.  
su interpretación. Siglo XXI Editores  
Nietzsche, F., (2013). El origen de la tragedia. Barcelo-  
na: Espasa Libros  
Rescher, N., (1998). Complexity. A Philosophical Over-  
view. New Brunswick and London: Transaction Pub-  
lishers  
Translated by R. G. Bury. Buffalo, NY.: Prometheus  
Books  
Smethan, G., (2010). Quantum Buddhism: Dancing  
in Emptiness  Reality Revealed at the Interface of  
Quantum Physics and Buddhist Philosophy. Lulu.com  
Vlastos, G., (1992). Socrates. Ironist and Moral Philoso-  
pher. Ithaca, N. Y.: Cornell University Press  
Sabbadini, S. A., (2017). Pilgrimages to Emptiness.  
4
4
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
CC, Vol.2. N° 2: 45-51. https//doi.org/ 10.48168/cc022021-005  
Hacia una ética compleja:  
interdependencia, ciudadanía  
global y ética del cuidado  
Towards a Complex Ethics:  
Interdependence, Global  
Citizenship and Ethics of Care  
Miguel Ramón Viguri Axpe  
Facultad de Ciencias Sociales y Humanas, Universidad de Deusto, España  
ResearcherID: X-6337-2019  
María Nely Vásquez Pérez  
Facultad de Teología del Norte de España, Sede de Vitoria, España  
ResearcherID: AAA-8850-2019  
Javier Martínez Baigorri  
ResearcherID: ABG-9031-2020  
Recepción: 14/10/2021  
Aceptación: 20/11/2021  
Resumen  
En nuestras sociedades globalizadas, la interdependencia se ha ido manifestando cada vez con mayor claridad  
como dimensión que atraviesa toda la existencia humana, en forma de red de relaciones basadas en cuidados  
mutuos. Esta red se da en un contexto sociopolítico evolutivo que ha de entenderse ecosistémicamente. La cons-  
trucción de una nueva ciudadanía globalizada, que responda a la naturaleza ecosistémica de todo fenómeno social  
y humano, demanda una ética también compleja y ecosistémica: la ética del cuidado. Una ética que supera tanto  
el esquema de las éticas materiales como el de las éticas formales o discursivas, para transformarse en una ética  
del equilibrio de unos principios sistémicos que evolucionan adaptativamente junto con la misma vida. La ética del  
cuidado, como ética compleja, entonces, es más que una teoría ética: es una forma alternativa de gestionar los  
problemas humanos derivados de la interdependencia y del carácter sistémico y no-lineal del efecto que ejerce-  
mos sobre los demás en la red de nuestros procesos de construcción humana y social.  
Palabras clave: Ética compleja; Interdependencia; Ética del cuidado; Ciudadanía global.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
45  
Abstract  
La pandemia ha golpeado al mundo de forma des-  
igual (Morin, 2020). Algunos pocos países parecen  
In our globalized societies, interdependence has be- relativamente a salvo, como es el caso de Islandia o  
comeincreasinglyclearas adimensionthatruns through algunos países africanos, tal vez porque su baja den-  
the entire human existence, in the form of a network of sidad demográfica los protege. Por el contrario, otras  
relationships based on mutual care. This network oc- naciones están sufriendo terribles oleadas de contami-  
curs in an evolving socio-political context that has to nación y muertes, como es el caso de Brasil, Estados  
be understood as an ecosystem. The construction of a Unidos, México, Perú, Argentina y Colombia. Las medi-  
new globalized citizenship, which responds to the eco- das sanitarias, que han sido muy diversas, han tenido  
systemic nature of all social and human phenomena, una eficacia muy desigual. Por otro lado, la emergencia  
demands an ethics that is also complex and ecosys- sanitaria ha suscitado también una intensa creatividad  
temic: the ethics of care. An ethic that goes beyond the entre la gente, lo que ha estimulado la imaginación en  
scheme of material ethics as well as formal or discursive la búsqueda de soluciones nuevas.  
ethics, to become an ethic of the balance of systemic  
La pandemia del COVID-19 nos enfrenta a una si-  
principles that adaptively evolve along with life itself. tuación sin precedentes, en la que descubrimos nues-  
The ethics of care, as a complex ethics, then, is more tra vulnerabilidad de modos varios y dramáticos (Flei-  
than an ethical theory: it is an alternative way of man- to, 2020). Nos creíamos ilusamente amparados por el  
aging human problems derived from interdependence poderoso sistema tecnológico global, pero nos hemos  
and the systemic and non-linear nature of the effect dado cuenta de la debilidad de los sistemas políticos,  
we exert on others in the network of our processes of económicos y sanitarios debido a otros factores sociales  
human and social construction.  
también globales. La vulnerabilidad de los sistemas de  
gestión de recursos, que encara la toma de decisiones  
Keywords: Complex Ethics; Interdependence; Ethics más compleja tratando de preservar la justicia, pone  
of Care; Global Citizenship.  
en cuestión nuestra capacidad para resolver adecuada-  
mente los conflictos de valores. Es preciso revisar estos  
1. Somos vulnerables de manera global e interre- entornos de vulnerabilidad porque la pandemia nos está  
lacionada  
obligando a repensar nuestro viejo modelo de sistema  
económico dominante y depredador, y a desarrollar una  
Ser vulnerable es ser susceptible de ser lastimado o he- nueva lógica interrelacional, así como una ética comuni-  
rido, ya sea física o moralmente. El concepto puede apli- taria que esté a la altura del reto de la interdependencia  
carse a una persona, a un grupo social o a una sociedad global.  
entera, según su capacidad para prevenir, resistir y sobre-  
ponerse de un impacto (Martínez, 2020; Valdés, 2021). 2. La pandemia nos obliga a repensar la lógica de  
Este concepto va unidoal de precariedad, la cual para Judi- la construcción social  
th Butler “depende en gran medida de la organización de la  
relaciones económicas y sociales, de la presencia o caren-  
A raíz de la paralización del sistema productivo, jun-  
cia de infraestructuras de apoyo y de instituciones sociales to con el bloqueo de la oferta y la demanda internas, del  
y políticas” (2017a, p. 121). Es decir, es algo sistémico y comercio y de las finanzas, la actividad de las econo-  
relacional, a lo que todos estamosexpuestos, tal ycomo ha mías avanzadas se contrajo un 7% en 2020. Los merca-  
mostrado la reciente pandemia mundial.  
dos emergentes y las economías en desarrollo se con-  
La pandemia del COVID-19 nos ha situado en un traerán un 2,5% este año 2021, su primera contracción  
1
contexto de vulnerabilidad global en múltiples aspec- como grupo en al menos 60 años . La disminución de  
tos. El resultado de la interconexión global de todas las los ingresos significará una pérdida del 3,5% en la renta  
sociedades del mundo, y de su mutua interacción ante per cápita, lo que empujará a la pobreza extrema a mi-  
la amenaza del COVID-19, ha sido de “bloqueo” o inca- llones de personas. El dogma neoliberal de considerar  
pacidad de la comunidad internacional para responder al ciudadano como un mero individuo definido por su  
de forma adecuada (conjuntamente) a la presencia de “racionalidad” (búsqueda del mayor beneficio privado  
un riesgo muy concreto pero globalizado (y, por tanto, con el menor coste), y a la sociedad como la suma de  
de evolución imprevisible), con el consecuente desastre estos individuos y sus “transacciones racionales”, solo  
en todos los ámbitos (vidas humanas, pérdida de de-  
1
rechos, quiebra económica, crisis de valores morales,  
crisis de fiabilidad en los sistemas de gobierno, crisis en  
la construcción del ciudadano y de la ciudadanía).  
1
9-to-plunge-global-economy-into-worst-recession-since-world-war-ii.  
Visto el día 29 de mayo de 2021.  
4
6
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
ha logrado en esta como en tantas otras crisis globa- 3. La salvación no vendrá ni solo ni principalmen-  
les agravar las desigualdades sociales y dar un poder te de la tecnociencia  
gigantesco a las grandes transnacionales que controlan  
la producción y el comercio de materias primas y de  
energía.  
El gran mito del capitalismo, que está colapsando,  
es el del progreso ilimitado. Se puede reducir a la ex-  
Es probable un derrumbe monetario-financiero: la presión: “la ciencia y la tecnología lo pueden todo”. Un  
crisis de la banca, los mercados especulativos y el cré- problema fundamental de este mito es que la ciencia  
dito, junto con las monedas globales. Ello unido a un dista mucho de ser neutral y está cargada de ideología.  
previsible decrecimiento. La falta de crédito ahogará el No se desarrolla lo que socialmente pueda ser impor-  
comercio, especialmente el internacional. También se tante, sino lo que el mercado considera adecuado. Un  
producirán fuertes migraciones como consecuencia de mercado que ha convertido toda la tierra en objeto de  
la crisis económica y climática, lo cual aumentará la mercado (Braidotti, 2009); de tal modo, como expresa  
multiculturalidad de las sociedades. Entonces se pro- Bernardo Pérez-Andreo (2011), “ha conseguido exten-  
ducirá un movimiento de globalización multicultural, derse hasta acaparar el globo entero”.  
contrario al movimiento globalizador-colonizador de la  
cultura occidental actual.  
El método científico se basa en el mecanicismo, el  
reduccionismo y el determinismo. Toma la realidad, la  
Todo lo descrito producirá un cambio en la percep- disecciona en partes y la estudia, sin realizar una re-  
ción social de la realidad y, por tanto, de los valores composición integradora del todo. La suplantación de  
dominantes. La sostenibilidad y una vuelta a una con- una visión orgánica del cosmos por una visión mecani-  
cepción más colectiva de la existencia serán elemen- cista tiene un profundo efecto en nuestra comprensión  
tos inevitables en las próximas décadas, así como una de la realidad. En el núcleo de esta visión determinista  
opción por los cuidados mutuos a todos los niveles, o se encuentra la idea de una causalidad lineal (Hathaway  
cuidados ecocomunitarios.  
y Boff, 2014).  
Ello es muy importante porque la crisis global se  
La mayor parte de las consecuencias climáticas de  
ha visto agravada por las carencias de una política  nuestros comportamientos actuales se verán en un pla-  
basada en un modelo de ciudadanía neoliberal que zo de 20, 30 o 50 años, en el mejor de los casos. Ahora  
ha favorecido el capital en detrimento del trabajo y ha estamos afectando a las posibilidades de vida de las  
sacrificado toda prevención y precaución en miras de generaciones futuras. Tenemos, así, una responsabili-  
la rentabilidad y de la competitividad. Los hospitales dad intergeneracional universal. Ello podría concretarse  
y el personal sanitario han sido víctimas de la política en forma de máxima “al estilo de Kant”, de la siguiente  
neoliberal que privatiza los servicios públicos y los manera: “Produce y consume de tal manera que tu ra-  
somete a las presiones de poderosos lobbies (Morin, zonamiento, tus principios y tus actos de producción y  
2
020). Precisamente por esto, a pesar de la adversidad, consumo sean universalizables en este mismo momen-  
han reaccionado como auténticos héroes. Pero no debe- to para cualquier habitante de la Tierra, de tal manera  
mos olvidar que primeramente han sido víctimas de un que quede protegida la vida y el derecho a la justicia y  
sistema político basado en unos conceptos obsoletos de la igualdad de las generaciones futuras, al menos en el  
construcción ciudadana.  
mismo grado en que tú las disfrutas”.  
La pandemia ha desvelado también nuestra de-  
Este principio ético ha de concretarse, por supues-  
pendencia total en muchas otras cuestiones: cadenas to, en la exigencia de responsabilidades políticas para  
de suministros, productos farmacéuticos, material nuestros gobernantes. El modelo lineal y mecanicista  
sanitario, etc. Este hecho nos insta a restablecer los de la ciencia y el progreso clásicos no es el más adecua-  
tejidos productivos regionales y locales, y, al mismo do para entender ni la vida ni las sociedades, las cuales  
tiempo, a reorientar la globalización tecnoeconómica, funcionan como un sistema complejo, orgánico, cuyas  
repensándola desde la conciencia de la realidad que propiedades son más que la suma de las partes y cuyo  
se nos ha impuesto con carácter de evidencia empí- funcionamiento es no-lineal e indeterminista. Por eso,  
rica: los humanos somos una comunidad de destino los economistas sostienen que la actual crisis económi-  
compartido, que necesita de mayor fluidez en la coo- ca es una crisis de “incertidumbre radical”. Fallan todos  
peración política y en los intercambios culturales. Si los modelos de previsión y precaución ante lo desco-  
esta conciencia humanista se difunde por el mundo y nocido de la nueva amenaza y el carácter global de la  
se convierte en una fuerza histórica, podría generar misma.  
una auténtica corriente transformadora que vaya in-  
cluso más allá del principio de solidaridad: hacia una indefinidamente porque no es ni omnisciente ni omni-  
ética del cuidado. potente, sino que siempre tendrá una información li-  
Por otro lado, el ser humano no puede progresar  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
47  
mitada y cometerá errores. Pero, además, los desafíos periencia de vulnerabilidad global, será una ética de la  
actuales a los que tiene que hacer frente la ciencia son acción en red y a través de redes, que asimismo piense  
los relacionados con los sistemas complejos, una de cu- los valores como nodos que se producen en las redes de  
yas características es su funcionamiento caótico (im- valoración y discernimiento que utilizamos, y los princi-  
previsible y sujeto a cambios bruscos o “transiciones de pios éticos como las dimensiones las variables que  
fase”). De esta manera, como sostienen Danah Zohar estructuran los nodos de la red.  
e Ian Marshall,  
Pensar de forma global y compleja es superar el tipo  
de racionalidad tecnocientífica, instrumental, lineal,  
[...] la transformación social requiere que cam- materialista y reduccionista, propio de la ciencia empí-  
biemos nuestras categorías de pensamiento básicas, rica clásica, tal y como ha sido asumida por el neolibe-  
que alteremos todo el marco intelectual en el que ralismo capitalista que busca la univocidad y la lineali-  
expresamos nuestra experiencia y nuestras percep- dad precisamente para predecir y, así, controlar. Pensar  
ciones. Tenemos, en efecto, que cambiar nuestro orgánica o ecosistémicamente es pensar de forma re-  
“modo de pensar”, aprender un lenguaje completa- ligadora, superadora de dicotomías y antagonismos,  
mente nuevo. (1994, p. 38)  
establecidos ideológicamente de forma interesada por  
aquellos que tienen poder para mantener a la masa de  
Una nueva cosmovisión que tenga en cuenta esta la población en la ficción de una individualidad plena-  
complejidad social, económica, tecnológica y cultural mente autónoma.  
proporcionaría un suelo fértil para nuestra imaginación,  
La ética del cuidado es una expresión de interdepen-  
y nos abriría a nuevas perspectivas y a nuevas posibi- dencia, que expresa la vulnerabilidad como elemento  
lidades. Una nueva lógica comunitaria dotaría a cada común a toda la especie humana y que nos iguala ra-  
país del sentido de pertenencia a una comunidad hu- dicalmente, haciendo posible la empatía y el estable-  
mana global. Ello requiere un cambio de mentalidad y cimiento de nuevos códigos de diálogo y construcción  
de planes de enseñanza escolar. Implicaría formar a los social y ciudadana. En tal sentido, la tarea del pensa-  
ciudadanos en la conciencia de pertenecer a la humani- miento global consiste en revelar la naturaleza com-  
dad antes que a una determinada etnia. También impli- pleja de los fenómenos especialmente los fenómenos  
ca capacitar para un pensamiento crítico que prevenga humanos y, por tanto, su interrelación e independen-  
el aumento de la xenofobia, el racismo y todos los fe- cia. En esta labor, se encuentra implícito nuestro com-  
nómenos de acentuación exacerbada de lo particular y promiso para con el mundo. Nos hallamos en una era  
lo propio. Para ello existen propuestas que desplazan el planetaria. La reforma del pensamiento debe estar al  
modelo de desarrollo desde el norte capitalista hacia la servicio de la humanidad entera y, de este modo, fo-  
periferia, donde es posible encontrar modelos alternati- mentar la solidaridad y la moral de la humanidad por  
vos que no han sido completamente fagocitados por la encima del individualismo destructor.  
modernidad y el capitalismo (Acosta, 2015).  
En esta tarea ética, el pensamiento de la compleji-  
La toma de conciencia de una nueva comunidad de dad asume una posición activa: a partir de la creencia  
destino compartido entre la naturaleza viva y la aventu- de que somos una parte componente de un sistema  
ra humana debe convertirse en un elemento esencial de más global, el enfoque orgánico supone que debemos  
nuestro tiempo. Es necesario que nos sintamos solida- actuar para estar en armonía con dicho sistema. Aquí,  
rios con este planeta, de cuya existencia depende nues- el diálogo entre las ciencias y las humanidades cobra  
tra vida; debemos no solo cuidarlo y protegerlo, sino un valor fundamental, pues las ciencias han descubierto  
también reconocer nuestra filiación biológica y nuestra un inmenso potencial derivado de la evolución, los sal-  
filiación ontológica.  
tos cualitativos y el carácter irreductible de las síntesis  
superiores a los niveles inferiores (con los que siguen  
4
.
La globalización obliga a un pensamiento com- guardando una unidad dentro de la radical novedad  
plejo: pensar ecosistémicamente  
surgida).  
Todo ello nos habla de interconexión entre los niveles  
La vinculación entre complejidad y ética está media- micro-meso-macro, y de una trascendencia a un ámbito  
da por el pensamiento complejo, que es el pensamiento natural que exige una nueva ontología; una nueva for-  
necesario tanto para captar las intrincadas interrelacio- ma de pensar con rigor los principios y las causas de la  
nes de los problemas éticos como para elaborar una realidad, una nueva filosofía. Ese diálogo entre ciencia  
ética situada en el marco de esas interrelaciones cam- y humanidades será el que nos ayude a comprender  
biantes. La ética del cuidado en una sociedad en tran- mejor nuestro lugar en el mundo. En definitiva, se trata  
sición hacia un modelo poscapitalista, fruto de la ex- de una reforma de nuestros esquemas mentales, de la  
4
8
CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
manera en que pensamos y concebimos el mundo y simultáneamente acontecimientos éticos: trazan un  
nuestra comprensión del mismo. espacio para caminar y transitar. Como decía el poeta  
En tal sentido, este cambio de paradigma también Antonio Machado: “Caminante no hay camino, se hace  
reclama una reforma educativa. El desafío educativo camino al andar”. No se trata solo de cambiar el mundo  
básico consiste en superar la fragmentación disciplina- (la relación entre las cosas y los hechos), sino también  
ria propia del currículo académico tradicional y estable- y al mismo tiempo nuestra más profunda identidad.  
cer un modelo de integración de saberes que se dan en Las reformas del pensamiento son simultáneamente  
la multidisciplinariedad, la transversalidad y la multidi- los cambios de nuestra manera de ser. De no ser así,  
mensionalidad, para todos los niveles educativos, desde tendremos que acostumbrarnos a los estragos de la  
la escuela hasta la universidad.  
racionalidad reductora, dualista y fragmentaria que ha  
La sociedad contemporánea está en constante trans- frenado sistemáticamente todos los grandes intentos de  
formación y atravesada por múltiples crisis. Vivimos un reforma social y ha impedido el surgimiento de una real  
cambio de época: una metamorfosis no solo cultural, fraternidad basada en una nueva humanidad.  
sino también antropológica que genera nuevos lengua-  
jes fruto del entrecruzamiento disciplinario.  
5. Somos una red de cuidados mutuos  
Estos nuevos lenguajes son imposibles de asumir y  
entender desde un planteamiento epistemológico clá-  
La modernidad, y especialmente el pensamiento  
sico y lineal. Necesitamos un nuevo “conocimiento del liberal, con su énfasis en la individualidad, obvia que  
conocimiento”, una sabiduría que posibilite un conoci- todos los seres humanos somos dependientes (necesi-  
miento de cómo usar el conocimiento para la super- tados de cuidados) en algún momento de nuestras vi-  
vivencia planetaria. Es decir, necesitamos una episte- das, sobre todo al inicio y al final del ciclo vital, cuando  
mología que, como estrategia del pensamiento y de la enfermamos o desfallecemos (Martín-Palomo, 2010).  
acción, nos permita una comprensión compleja y reli-  
Ello ha quedado dramáticamente patente en la pan-  
gada de la crisis social y posibilite una transformación demia del COVID-19. La imposibilidad de acercarnos y  
sinérgica de las amenazas anteriormente descritas. Por cuidar a nuestros familiares enfermos, aislados, nos ha  
ello, pensar de forma compleja y global requiere una colocado en una situación de dependencia de un siste-  
nueva alianza entre ciencias y humanidades; entre el ma de bienestar colapsado y desbordado por su anclaje  
pensamiento y la vida; entre nuestro interior mental y en los conceptos de la ciudadanía liberal y neoliberal.  
las múltiples realidades en que se circunscriben nues- Tal realidad nos ha hecho tomar conciencia de que la  
tras vidas y ello, a su vez, requiere de una reforma dependencia y la vulnerabilidad no son situaciones ra-  
educativa que posibilite las herramientas para pensar ras, excepcionales o accidentales, que solo les suceden  
globalmente y actuar localmente.  
a “otras personas”, sino que son rasgos inherentes a la  
Ahora bien, no se trata de decir apriorísticamente condición humana.  
lo que hay que hacer cosa, por demás, imposible,  
Decir “vulnerabilidad global” es, en realidad, una re-  
sino de ir tejiendo con otros este gran lienzo o “trama dundancia. Lo que ocurre es que ha tenido que fallar  
de la vida”, como bien señalaba Fritjof Capra (2008). el sistema de protección social y el sistema económico  
Por tanto, no se trata de transponer conocimientos, para que nos demos cuenta de que el mito liberal del  
sino de situarnos en un proceso dialógico de decons- progreso ilimitado y del crecimiento ilimitado e indivi-  
trucción/construcción de una nueva alianza (ciencias y dualista del bienestar es una ideología fallida.  
humanidades) y dejarnos asombrar por las formas de  
La vulnerabilidad, la fragilidad y la interdependencia  
pensamiento que hacen visible otra posibilidad. Se tra- son condiciones propias de la naturaleza humana y es  
ta de visualizar cómo unos conceptos que surgen de la gestión de la vulnerabilidad la que ha llevado a las  
disciplinas tan aparentemente dispares como la física, personas a organizar la vida común a través de una  
la química, la ética, la biología, la teología y la filosofía red de cuidados solidarios. A pesar del individualismo  
buscan una unidad fundamental, y pueden formar un que genera el sistema económico dominante, los seres  
tejido de lectura de nosotros a través de esa unidad humanos somos seres frágiles que necesitamos de los  
religadora (pero no totalizadora ni uniformizadora) que cuidados de otros seres humanos para poder sobrevivir  
habla y actúa en nosotros. De esta manera, las nocio- (Millán y Santander, 2020).  
nes interdisciplinarias se constituyen en conceptos-bús-  
Reflexionar sobre la vulnerabilidad implica, cuando  
queda, medios para un diálogo, negociación y creación menos, caer en la cuenta de que, aun siendo adultos,  
de nuevos aprendizajes.  
Por otro lado, estos conocimientos en cuanto es-  
tablecen una práctica en-redada con el mundoson  
sanos e independientes, somos frágiles. Nuestra subsis-  
tencia, nuestra vida, nuestros proyectos, los sustentan  
cada día buen número de cuidados que nos dispensan  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
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otras personas, o que nos prestamos a nosotros mis-  
Uno de los grandes logros de la Ilustración fue el  
mos; aspectos tan básicos como los hábitos de descan- descubrimiento de la autonomía, aunque degeneró en  
so, nutrición y aseo, que poseemos porque hemos sido un excesivo individualismo por una deriva liberal de las  
educados así en redpor otros.  
sociedades modernas. Un individualismo que implicaba  
Cada ser humano es el centro de una red comple- la inflación de los derechos individuales, sin referencia  
ja de relaciones de cuidado, en la que generalmente alguna a los deberes, y la pérdida del sentido de perte-  
cada uno es cuidado y cuidador, según el momento o las nencia a la comunidad (Comins Mingol, 2015). La lógica  
circunstancias. Sin embargo, esta es una idea que no que guía la ética del cuidado, por el contrario, es la de  
suele ser considerada. Aceptarla supone asumir que to- los seres humanos conscientes de ser necesitados unos  
das las personas somos vulnerables, y además revisar de otros para conseguir una vida digna, y que optan  
el ideal de total autonomía que preconiza la ideología también conscientemente por construir su personalidad  
neoliberal.  
a través de las relaciones de cuidado con los otros. En  
definitiva, una lógica que lleva a considerar que todas  
6. Ética del cuidado global y nuevos modelos de las vidas merecen ser lloradas (Butler, 2017b).  
ciudadanía  
A la hora de construir modelos de ciudadanía, no se  
puede continuar dando por supuestas las estructuras  
Estas consideraciones invitan a desarrollar una re- del cuidado herederas del modelo de rígida división de  
flexión crítica sobre la vulnerabilidad y la interdepen- lo público y lo privado, que obvia que todas las perso-  
dencia como condición humana universal. En palabras nas somos vulnerables. Pero, para ello, se necesita un  
de María Teresa Martín-Palomo:  
nuevo modelo o paradigma de pensamiento que una en  
vez de dividir; que religue, en vez de desligar y aislar.  
¿Cómo conciliar la vulnerabilidad genérica con Ese pensamiento es el pensamiento complejo.  
las vulnerabilidades concretas?, ¿cómo partir de  
esta consideración de la interdependencia y de la 7. Conclusiones: ética del cuidado como ética  
vulnerabilidad sin contribuir a banalizar o ignorar compleja  
las vulnerabilidades particulares?, ¿cómo evitar  
que la vulnerabilidad se transforme en una mera  
abstracción? (2010, p. 63)  
El ciudadano global que practica esta ética del cui-  
dado, basada en la consciencia de la vulnerabilidad—  
es una persona que se identifica como parte integral  
En el camino de la construcción de una globalización de una comunidad mundial emergente. Es alguien  
humana, es ineludible comprender las necesidades de que piensa en las problemáticas que están afectando  
los más vulnerables y desarrollar nuestra capacidad de a nuestro planeta, de manera global, contribuyendo al  
empatía para entender sus necesidades. La ética del bienestar de la humanidad desde su propio lugar.  
cuidado, a diferencia de otras tradiciones éticas, par-  
Un ciudadano global ve más allá de intereses par-  
te de una visión relacional e interdependiente de las ticulares. No solo va más allá de los intereses indivi-  
personas. El problema radica en la incapacidad de po- duales, sino incluso trasciende los intereses de grupos  
nerse en el lugar de otros seres humanos que carecen particulares, aunque sean grupos mayoritarios en de-  
de oportunidades de superación, simplemente porque terminadas sociedades. Su búsqueda es del bien co-  
están lejos de nosotros ya sea conceptual o geográ- mún, que es el bien de todos, no solo de unos pocos o  
ficamente. La vida exige un caudal de amor, dirigido de una mayoría al precio de la injusticia sobre las mino-  
incluso a los seres alejados de nuestra experiencia coti- rías. Un ciudadano global cultivará la lógica del consen-  
diana. Es precisamente lo ilusorio de la distancia física, so y la metodología del diálogo deliberativo e inclusivo.  
espacial y cultural, lo que debemos abordar al pensar Esta conciencia es el resultado de una combinación de  
en una ética global y cosmopolita.  
empatía y conocimiento de la interconexión del mundo.  
Los ciudadanos globales participan de un esfuerzo  
Frente al miedo y a la amenaza que se erigen en Oc-  
cidente como visión de la otredad, la ética del cuidado común por articular principios y criterios de decisión  
global centrada en la vida puede ayudarnos a cam- compartidos consensuados deliberativamente para  
biar de mentalidad respecto a la visión de la otredad. apoyar unas nuevas creencias, valores y prácticas que  
Una era de la interdependencia global demanda una éti- constituyen una ética compleja: la ética del cuidado.  
ca relacional que sitúe el valor más elevado en la pro- Una ética global y ecosistémica que ayuda a aceptar la  
moción, restauración o creación de buenas relaciones vulnerabilidad, la interdependencia y la empatía nece-  
sociales y personales, y de prioridad de las necesidades sarias para motivar y mantener el compromiso trans-  
e intereses de otros concretos (Robinson, 1999).  
formador.  
5
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CIENCIAS DE LA COMPLEJIDAD  
La religación ética que surge de todo ese cambio Fleito, L. (2020). Vulnerabilidad y deliberación en tiem-  
consiste precisamente en cuidados mediante unio-  
nes, vinculaciones, relacionesque causan un bien,  
que resultan benéficos y beneficiosos para las personas  
pos de epidemia. Enrahonar. An International Jour-  
nal of Theoretical and Practical Reason, 65, 27-36.  
https://doi.org/10.5565/rev/enrahonar.1303.  
implicadas en ella y que, de ese modo, generan, cons- Hathaway, M. y Boff, L. (2014). El Tao de la liberación.  
tituyen, mantienen y regeneran a la sociedad. La nueva Una ecología de la transformación. Madrid: Trotta.  
ética del cuidado se manifiesta como la apuesta por una Martín-Palomo, M. T. (2010). Autonomía, dependencia  
red de relaciones empáticas necesarias para la creación  
y la continuidad de la sociedad; relaciones mediante las  
cuales la sociedad se constituye y regenera, no como  
y vulnerabilidad en la construcción de la ciudadanía.  
Zerbitzuan, 48, 57-69. Recuperado de https://bit.  
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William Morrow.  
Revista de la Unidad de Investigación de la Facultad de Economía de la UNSA  
51  
PRÓXIMOS NÚMEROS  
JUNIO 2022  
Complejidad y ciencias sociales en América  
Latina: aportaciones individuales y colectivas  
EDITOR INVITADO: Dr. Eligió Cruz Leandro  
Académico del Instituto de Investigaciones  
Antropológicas de la UNAM  
DICIEMBRE 2022  
Complejidad y perspectivas de Género:  
Ciencias e Interseccionalidad”.  
Editores: Miguel Ramón Viguri Axpe (profesor  
e investigador de la Universidad de Deusto)  
y María Nely Vásquez Pérez (profesora e  
investigadora de la Facultad de Teología de  
Vitoria).  
JUNIO 2023  
Vida y Complejidad  
Dr. Carlos Eduardo Maldonado  
Profesor Titular  
Universidad El Bosque  
Cienciasde  
lacomplejidad  
Revista de la Unidad de Investigación  
de la Facultad de Economía de la UNSA  
UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN DE AREQUIPA  
Facultad de Economía  
Unidad de investigacion de la Facultad de Economía  
Arequipa - Perú